Por el partido de ida de la Fase Preliminar Regional, Talleres le ganó este miércoles 1-0 a Defensores de Pronunciamiento. La vuelta será el martes 16, en el Mario Kempes. Le costó.

Qué son 90 minutos de un partido de fútbol sin goles... Algo gris, sin demasiado sentido. La vida está en la chance de gritar un gol, en “pronunciarlo”. En la noche de este miércoles, Talleres y justamente Defensores del Pronunciamiento parecía que se iban a quedar con las ganas en el partido de ida por la Fase Preliminar Regional de la Copa Argentina, que se jugó en la cancha de Gimnasia de Concepción del Uruguay.

Pero apareció el delantero Javier Velázquez, justo en el día de su cumpleaños número 32, para gritar el único gol de la noche y darle el triunfo a la T que sostiene la chance de meterse en los 32avos. de la Copa, si es que supera en el partido revancha por la Fase Preliminar Regional a Defensores. La vuelta será el martes 16 de febrero, en Córdoba. Si hay igualdad en los 180 minutos, habrá penales.

El encuentro fue muy parejo en un comienzo. El equipo que hacía de local en la cancha de Gimnasia de Concepción del Uruguay intentó hacerse fuerte, mientras Talleres se acomodaba al esquema 4-4-2 que proponía Kudelka.

Recién a los 17 minutos tuvo la primera ocasión la T, con un cabezazo del regresado Gonzalo Klusener, que pasó muy cerca del palo. Desde allí, el Matador empezó a dominar la pelota y a hacerse dueño del encuentro. Aunque no había situaciones.

Recién a los 38 minutos, Kluse la dejó pasar en el área y tuvo la oportunidad Agustín Gutiérrez. Pero hizo lucir al arquero Catriel Orcellet. Así, el primer tiempo se fue sin goles. En el complemento, la historia comenzó de igual manera. Talleres intentaba ser protagonista, aunque su rival realmente le hacía las cosas difíciles. A los dos minutos pudo abrir el marcador nuevamente Klusener, pero el 9 chocó contra Orcellet. El punta tenía el gol cada vez más cerca. El correr de los minutos obligó a Kudelka a analizar las variantes. Y entraron Nazareno Solís y Javier Velázquez, para intentar generar más situaciones de gol. Mientras tanto, Reynoso era quien le daba fútbol al equipo.

Se iba el partido y volvería a llegar Talleres una y otra vez. El gol parecía que no tenía quién lo grite, hasta que apareció Velázquez. Un gol que vale un triunfo y facilita el pase en la Copa. Y sí, lo pronunció Velázquez...