El partido. En el estadio de la Avenida, como le dicen a la cancha de Unión, la T no pudo aprovechar varias situaciones de gol para ganar.

Con ganas, sí, así transitó Talleres por la Avenida, como se le llama al estadio de Unión Sunchales. Sabiendo adónde llegar (al triunfo) pero no que atajos encarar. Renegando por su maniobra anunciada, incapaz de pegar el volantazo y acelerar a fondo. Embotellado. Y el 0-0 fue un fiel reflejo de una tarde que no fue la mejor de frente al arco.

Talleres engañó con un inicio falaz. Con Cristian Zárate como enganche definido pareció que iba a inclinar la cancha a su favor. El 10 tocó para Ruiz que escaló oportuno, y de frente al arco, asistió a Sacripanti pero le pellizcaron la pelota a punto de definir.

Después, Unión se acomodó a la circunstancia y le encontró la vuelta al planteo del Sapito Coleoni. Adelante, los puntas del Verde, Triverio y Baudino, sacaron a los laterales Ruiz y Barón hacia los costados y encontraron espacios para lastimar.

Al medio, Gianunzio no tuvo socio seguro en el primer pase, puesto que Pieters quedó comprometido a volantear. A Zárate le comieron los talones entre Autino y Pautasso y Talleres decayó.

A los 18, Sacri habilitó a Riaño que le reventó el pecho a Núñez. A los 22, Sacripanti sacó un chutazo sin potencia y otra vez el 1 local respondió bien. Hasta que Unión lo prepeó. Triverio le ganó la espalda a Barón y Crivelli la sacó al córner. La casualidad, luego, ayudó a Talleres. Riaño peleó una pelota, Fler despejó mal, rebotó en delantero y la pelotita casi se cuela. Lo bueno de Talleres fue su intención de jugar pero terminó el PT con dudas en el retroceso defensivo.

Poco cambió. En el ST Talleres fue buscarlo. A los 9, tras buena jugada colectiva, Riaño la empujó al gol pero todo estaba invalidado por offside de Sacripanti.

Después fue el Bicho quien lo tuvo con Triverio de media tijera y apareció el reflejo de Crivelli para evitar la caída.

A los 21 llegó la polémica. Fler, de Unión, se la llevó puesta con la mano pero el árbitro Fabián entendió que fue casual y todo Talleres reclamó un evidente penal.

A los 22, Coleoni mandó a la cancha al pibe Álvarez que, con Navarro que había reemplazado a Pieters, le dio más juego a la T. Cuando moría el partido, Álvarez metió un pase-gol para Aranda, que se topó con Núñez y un manotazo salvador.

Talleres pudo ganarlo. Pero también perderlo. Quedó frenado. Preguntando cómo avanzar en la Avenida que lo encerró y no lo dejó llegar a la ciudad de La Victoria.

El 1x1 de la T

»CRIVELLI (6). Respondió en todas las que le tiraron.
»RUIZ (6). Pura entrega.
»RIBONETTO (6). Firme arriba.
»COSARO (6). Sólido.
»G. BARÓN (5). Sin problemas.
»PIETERS (5). Empezó enchufado pero se quedó intermitente.
»GIANUNZIO (6). Una fiera quitando en el medio.
»ANÍVOLE (5). Sin desnivel.
»ZÁRATE (6). Se cargó el equipo al hombro con actitud.
»SACRIPANTI (6). Cumplió.
»RIAÑO (5). Listo para la lucha, pero no fino en la definición.
»NAVARRO (5). Se perdió un gol echo. En la marca, bien.
»ÁLVAREZ (6). Pura explosión y desnivel. De lo mejor.
»ARANDA (-). Entró faltando 15. Tuvo y se la sacaron.