Polémico. La T cayó 3-2 sin jugar bien y con el arbitraje de Aredondo, criticado. Claudio Bustos dos veces y Cristián Núñez marcaron para la Juve. Claudio Riaño y Ruiz para la T.

El plan era perfecto. Todo estaba minuciosamente estudiado por el capo de la banda, un tal Héctor Arzubialde. A su disposición tenía 11 jugadores de primera mano para dar el gran golpe: vencer a Juventud Unida Universitario, en San Luis, y estirar la brecha con sus inmediatos perseguidores. Sin embargo, no pudieron hacerse con el botín más preciado: los tres puntos. Cuando todo hacía presagiar que la T iba a vencer de visitante, el plan falló desde la ejecución propia y con la polémica de un arbitraje que lo juzgó y lo sentenció. Al final, fue 3-2 para los puntanos, con dos goles de penal largamente discutidos por los del Matador.

El partido se hizo querible más desde la emoción que desde el juego. Es que, con la pelota, ni Juventud ni Talleres tenían la virtud para generar peligro con ella y se la prestaban un rato cada uno.

Los de Arzubialde paraditos con un claro 4-4-2, después de dejar atrás el sistema con enganche ante la ausencia de Ramiro Pereyra. De esa manera, Anívole por izquierda y Pieters por derecha comenzaron a lastimar al fondo puntano. Hasta que, a los 17, cuando todavía no habían inquietado a los arqueros, Anívole mandó un centro preciso desde la derecha para que Riaño, de cabeza y, en soledad, pusiera el 1-0 y diera la sorpresa.

No obstante, la ventaja no fue aprovechada por el Tallarín que regaló espacios que la Juve ocupó decidido. Anívole pudo poner el 2-0 pero cabeceó débil. Luego, Núñez lo tuvo para el local pero su remate salió desviado. Pero, en un córner, el propio Núñez se la puso en la testa a Claudio Bustos, que con el parietal izquierdo, ajustició a Crivelli: 1-1, a los 38 del PT. Con la igualdad, el desarrollo del juego volvió a emparejarse. Monay luchaba para recuperar junto a Seba Navarro. Pero, el plan de Arzu se vino abajo cuando el árbitro Marcelo Aredondo pitó penal de Ruiz sobre Rosales (reclamaron que fue fuera del área). Todo Talleres protestó. Otra vez Bustos, a los 47, lo cambió por gol, al darle cruzado sobre el caño que eligió Crivelli.

En el complemento se discutió más de lo que se jugó. De hecho, Bustos vio la segunda amarilla y se fue expulsado. Al rato, otra vez el árbitro cobró penal de Monay a Negri que desató la ira de todo Talleres. Esta vez fue Núñez que clavó el 3-1 para los san luiseños.

Ya con Agustín Díaz en cancha, la T mostró otra imagen. El Tin entró enchufado. En una tocó para el Chavo Ruiz, que casi la emboca. A los 34 fue Rezzónico que por poco la manda a guardar. Hasta que, a los 45 del segundo tiempo, vino el centro de Díaz para que, de cabeza, Ruiz ponga el 3-2 y naciera el suspenso. Arzubialde lo vivió a pleno, mientras el árbitro era cuestionado por los jugadores de Talleres, por los fallos polémicos de los penales. Al final, el plan para robar los tres puntos quedó trunco. A Talleres lo juzgaron y sentenciaron en San Luis y deberá cumplir la pena.

La figura: Claudio Riaño. El delantero de Talleres llegó al gol. Además, se movió por todo el frente de ataque y asistió a los volantes que se proyectaban. En la visita, Cristian Núñez fue lúcido para jugar. Participó en el segundo gol y marcó el tercero.