Racing y Talleres empataron 1-1 en el clásico de la 2ª fecha del Argentino “A”. Moreira Aldana abrió la cuenta para la “T” al inicio, y Martos igualó en el final para la Academia.

Agónico por el final mismo del partido. Emotivo por cómo se dieron las acciones. A veces chato por la previsibilidad de ambos a la hora de jugar, pero igualmente electrizante.

Racing y Talleres no se sacaron ventajas. El empate 1 a 1 marca los premios y castigos para uno y otro. La insistencia, el no darse por vencido aún vencido y el reconocer que los partidos terminan en el minuto 90 fue el premio para Racing. La parsimonia de algunos de sus jugadores, el no saber cerrar el partido y el querer hacerlo metiéndose todos atrás fue el castigo para Talleres.

El domingo a la mañana, antes del sofocante calor, envalentonaba a acercarse al Chateau. Y más de uno se debe de haber estado acomodando en su lugar cuando Moreira Aldana madrugó a todos con un cabezazo para abrir el marcador. Iban 2’, tras un tiro de esquina y toque corto entre Anívole y Arce llegó un centro medido que Del Olmo calculó muy mal pero que el paraguayo aprovechó con un potente frentazo para abrir el marcador.

Claro, las cosas recién empezaban y el 0-1 en contra obligó a cambiar la táctica que Ranalli tenía pensado en Racing. Entonces el progresivamente ir a buscar los espacios para acercarse a Giordano, transformado después en la figura de la cancha, provocó confusión en los albicelestes. Velárdez lucía perdido y obviamente, Racing partido en dos. Además el “Chori” Sosa, a contramano de lo que se supone haga, bajaba a tomar contacto con el balón y encima a la hora de atacar le tiraba los centros a Bergese. ¿No es al revés?A favor de Talleres había una diferencia de velocidad, aprovechada en las espaldas de los carrileros de Racing con Anívole y Díaz quien además le ganó toda la mañana la posición a Avalos, muy lento, por cierto . En consecuencia, su trajinar era más práctico y rápido, como que después del 1-0 el equipo se tranquilizó y posibilitó ensamblar mejor las partes. Es más, muchas veces el mismo Díaz como Anívole y Moreira dejaron desparramado a Fernández todas las veces que el ex Belgrano salió a cortar o a marcar.

Pero pasada la media hora de juego comenzó “el duelo” de la mañana: Eduardo Sosa y Matías Giordano. Desde ese momento, todos los intentos del “9” de Racing terminaron siempre bien resueltos por el debutante arquero tallarín.

A los 33’ Sosa cabeceó un centro de Bergese al lado del palo; a los 38’ el cuidapalos desvió un tiro libre de Martos y a los 41’ le tapó otro a Bergese.

Saporiti mandó a Galarraga para poblar, aún más el mediocampo y contener los posibles embates racinguistas.

A los 2’ del complemento un bombazo desde 25 metros de Monay, que se perdió por poco fue la única jugada de peligro y único tiro al arco de la “T” en esa etapa. Porque más allá de poblar el medio, a Talleres esa jugada se le volvió en contra. Así fue como dos variantes más cambiaron definitivamente el trámite del juego: a los 13’ entraron Céliz por Arce y Lorenzatti por Verón. Es decir, Saporiti bajó la persiana del partido muy temprano, poniendo un defensor, sacando un delantero y plantando dos líneas de cuatro. Por contrapartida y por la necesidad, Ranalli apostó a un tercer delantero como Lorenzatti para resignar un volante como Verón.

Creció Rivadero, creció Bergese, creció Velárdez, Lorezatti le dio aire al ataque y sólo faltaba que Sosa enderezara la mirilla. Pero Giordano se le interpuso en el camino una, dos, tres y todas las veces que quiso ante un “Chori” que siempre cambió la faceta: de derecha, de izquierda, de media vuelta, de cabeza... No había forma de vulnerar al arquero que aguantaba a un equipo tirado atrás, demasiado atrás.

El partido se moría. “Un minuto de silencio... para Racing que está muerto”, fue el himno albiazul, festejando por anticipado. Iban 44’ y enésimo tiro de esquina académico, ahora ejecutado por Méndez, la pelota en las alturas fue ganada por Martos quien vulneró la férrea resistencia de Giordano. Gol y explosión del otro lado. Pero Racing lo quiso ganar, tanto que un rato después entre Bergese y Lorenzatti comprobaron que Giordano era casi imbatible.

Final. Empate. Premio al que buscó siempre y castigo a una formación amarreta.

RACING 1 / 1 TALLERES


RACING. Del Olmo, Hernán Fernández, Rodrigo López, Martos Darío Rivadero, Mauricio Verón, Avalos, Pugliese, Velárdez, Bergese, Eduardo Sosa. DT: Carlos Ranalli.

TALLERES. Giordano; Ciucci, Aballay, Galíndez; Palacio, Monay, Cristian Basualdo, Anívole, Agustín Díaz; Federico Arce, Moreira. DT: Roberto Saporiti.

DATOS
• Goles: PT: 2m. Moreira (T). ST 44m. Martos (R).
• Cambios: ST: al inicio Galarraga por Palacio (P); 13m. Lorenzatti por Verón (R) y Céliz por Arce (T); 21m. Emiliano Romero por Rivadero (R); 29m. Méndez por Pugliese (R) y 31m. Baigorria por Díaz (T).
• Amonestados: en Racing: Martos, Verón, Sosa y Romero. En Talleres: Giordano, Galíndez y Monay.
• Arbitro: José Capraro (Tucumán).
• Cancha: Estadio Córdoba (local Racing).
• Público: 22 mil personas.