Unión no dio curso al ofrecimiento de la "T", porque no tiene alternativas para el puesto de delantero. El entrenador Asconzábal no quiere que se vaya.

"Unión no quiere dejar salir a Franco Troyansky". La afirmación partió desde la directiva de Talleres, quien había elevado una oferta de compra por el 50 por ciento de la ficha del delantero al club "tatengue" y que estaba compuesta por un dinero más el 25% por ciento de la ficha de Gabriel Carabajal (su préstamo vence en diciembre) y de algunos jugadores del Talleres que no volvió, caso Junior Arias.

La directiva "tatengue" terminó rechazando la propuesta inicial albiazul por un doble motivo. "De la única manera que nos desprenderemos es por una oferta que no podamos rechazar", dijo el director deportivo de Unión a El Litoral de Santa Fe. 

Además de lo económico, también influyó un factor deportivo: el DT Juan Asconzábal no tiene demasiadas opciones en el puesto. Unión ya se desprendió de Nicolás Mazzola y de Walter Bou (volvió a Boca), por lo que Troyansky quedó como la principal referencia ofensiva junto al recientemente incorporado Fernando Márquez.

Ambos son prioridad y están por delante de Javier Cabrera y los delanteros que retornaron de préstamos en otros clubes, Nicolás Andereggen y Matías Gallegos. 

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