Con el golazo de Bustos, Talleres volvió a ganar en el Monumental, tras casi 30 años.

Después de 29 años, cuando esos dos goles de Mario Bevilacqua en la tarde del 4 de marzo de 1990 eran un punto cada vez más lejano en la historia, Talleres pudo volver a dar un grito grande en el estadio Monumental.

Aquella vez, derrotó 2-1 al River de Daniel Passarella que luego fue campeón. Anoche, ganó 1-0 con un golazo de Nahuel Bustos. Y lo más importante fue que lo hizo sin ningún golpe de fortuna, apostando siempre a ganador. Y con un planteo del técnico Alexander Medina que salió redondito, inmejorable.

Todo lo que tenía que hacer la “T” para ganarle al lado “B” del River de Marcelo Gallardo, lo hizo de la mejor manera. Fue ordenado, aplicado, intenso, agresivo e inteligente, tuvo a los mejores jugadores del partido y, con y sin la pelota en 80 de los 90 minutos, le remarcó diferencias a un equipo que preservó a “9” de sus titulares para el desquite copero del jueves ante Cerro Porteño en Paraguay. Y que acaso por eso lució errático, desencontrado con la pelota, sin peso en ningún sector de la cancha.

En cambio, Talleres nunca le quitó la cabeza al juego. Hubo una atención sin fisuras y ninguno de los jugadores se distrajo. Como si tuvieran una noción exacta de todo lo que arriesgaba el equipo. La exigencia era elevada, tanto como los riesgos. Pero nadie falló y todos estuvieron a la altura. El entrenador uruguayo Alexander Medina dando en la tecla con su idea. Y los futbolistas albiazules llevando el plan adelante sin renuncio alguno.

Lo mejor

Fue sin dudas, la mejor actuación albiazul en lo que va del torneo. Tanto que el DT admitió que se rozó la perfección. Desde ahora, el piso y el techo han quedado más altos de lo que estaban antes de la visita al Monumental. Y a partir del próximo partido, con Aldosivi, todos van a pedirle a Talleres que repita y en lo posible aumente lo de ayer. No será fácil hacerlo.

“Estoy contento por mi actuación, pero más por el trabajo del equipo. Hicimos casi todo bien y cometimos muy pocos errores, Salió todo lo que planificamos en la previa” reconoció Andrés Cubas, una de las grandes figuras del partido. “Sabíamos que ellos triangulaban muy bien y que todos teníamos que correr cuando ellos tenían la pelota. Hicimos un gran desgaste y esa fue una de las claves, que no nos relajamos en ningún momento”, admitió el ex volante de Boca, mucho más cómodo con el formato de cuatro volantes que dispuso el DT Medina.

Después de semejante triunfo y de tan buena actuación, luego del golazo de Nahuel Bustos que le dio la victoria a Talleres, un interrogante empezó a flotar en la antesala de un vestuario feliz. ¿Recuperará la titularidad el colombiano Dayro Moreno? ¿Será tenido en cuenta otra vez por el técnico o seguirá quedando de lado? Anoche, ni siquiera fue llamado para jugar los minutos finales, Pero Medina descartó todo conflicto.

“Que no lo haya puesto a Dayro, no significa que haya dejado de considerarlo. Tengo que pensar en lo mejor para el equipo y hay que tener en cuenta las circunstancias y los partidos, todo puede suceder en el futuro”, dijo Medina con el pecho inflado, sabedor de que su crédito se amplió en el Mundo Talleres. Con un triunfo de esos que dejan una marca profunda en la historia. Fue un Tallerazo.