El delantero de Talleres arrancó el 2018 con todo. Tras sufrir varias lesiones, hoy se siente contento por lo que está viviendo y le agradece a todos los que lo ayudaron.

El partido ante San Lorenzo no fue uno más para Aldo Araujo. Pero no sólo porque arrancó el año haciendo un gol para Talleres que le sirvió superar al Cuervo, sino por todo lo que había luchado hasta ese momento.

El delantero sufrió varias lesiones que lo marginaron por un tiempo cortado pero prolongado de las canchas. Por eso, con el correr de los encuentros va tomando mayor confianza y se siente feliz por lo que está viviendo.

"Cada partido que pasa me voy sintiendo mejor. La gente, cada vez que entro a la cancha, me demuestra su cariño. Una palmada, cuando me dicen que esté tranquilo que todo va a llegar... todo eso me pone feliz", aseguró Araujo este lunes.

"Estuve muy dolorido por las cosas que me pasaron, pero con el apoyo de la familia, los compañeros, cuerpo técnico y dirigentes uno puede salir adelante. Estoy muy agradecido a ellos. El compañerismo que hay entre todos es algo increíble. Desde que llegué cuando estábamos en el Federal A hasta acá es todo muy lindo", continuó el delantero.

Sobre las lesiones que sufrió, Araujo dijo: "Muchos dicen que es la cabeza, psicológico. Yo estaba bien de la cabeza. Obvio que ahora estoy con el psicólogo y estoy mucho mejor. Pero creo que era un propósito de Dios y hoy paso un lindo momento. Estoy feliz después de superar lo malo que pasé".

Sobre el futuro de la "T" en la Superliga el punta aseguró que el objetivo es jugar la Libertadores, pero no se baja de la pelea con Boca. "Nuestro objetivo es claro: entrar a la copa. Tenemos que seguir esforzándonos el doble. En algún momento creo que Boca va a caer. Y tenemos que estar listos para estar ahí y no regalar más puntos".