En un clásico que desafortunadamente tuvo hechos para lamentar, el DT de Talleres se tomó una foto con un pequeño hincha de Belgrano que quería posar con él. De esos gestos que valen.

El clásico dejó saldos negativos y para lamentar, más allá que el comportamiento de la inmensa mayoría que colmó el Kempes fue para destacar, por el espectáculo que brindó.

La agresión en la cabecera Willington a un hincha que está muy grave, y la bala de goma que recibió otro simptizante del Pirata empañaron una fiesta del fútbol cordobés.

Por eso vale el gesto del final, como redención y para seguir pensando que se puede alejar la violencia del fútbol.

Cuando el plantel de Talleres se marchaba del Kempes tras el empate, un pequeño hincha Celeste se arirmó a Frank Kudelka y le pidió posar juntos para una foto.

Y el DT albiazul aceptó gustoso. Una síntesis reconfortante de lo que debe ser el clásico cordobés.