El ex-Pachuca es el sexto jugador cafetero en la historia de la “T”. Mosquera y Serna fueron los mejores. Ya trabaja en Santa Fe.

“Va a venir un colombiano”, es lo único que alcanzaba a filtrarse del entorno del presidente Andrés Fassi en torno a los refuerzos extranjeros que llegarían a Talleres. La búsqueda se centró en el acto en los clubes del Grupo Pachuca, dado que el propio directivo había dicho que no había que descartarlo.

Finalmente, el domingo se oficializó la llegada del delantero John Freddy Pajoy, de 27 años, nacido en Cali y quien jugó para los “Tuzos” en 2014.

“Vine con el propósito de hacer las cosas bien y la ilusión de completar un buen torneo. Se que vengo a representar a una institución muy importante”, dijo quien explotara en Once Caldas y Atlético Nacional entre 2011 y 2013, cuando marcó 38 goles en 130 partidos.

Lo cierto es que Pajoy llegó a Córdoba, el martes pasado, listo para irse de pretemporada. “Vine para dar lo mejor”, dijo quien viene del Deportivo Independiente de Medellín, donde jugó 17 partidos y anotó 4 goles.

Lo cierto es que se trata del sexto colombiano que vestirá la camiseta de Talleres. El primero de ellos dejó un gran recuerdo: Roberto Orlando Mosquera. El actual DT de Sporting Cristal, llegó a Córdoba para jugar el Nacional 1981, tras haber estado en el Mundial 1978 como nacionalizado peruano. Mosquera jugó 21 partidos y anotó tres goles, en un torneo en el que Talleres salvó la categoría en la fecha final ante Instituto.

Recién en 2004 apareció Mauricio “Chicho” Serna, quien llegó como gran figura tras un paso por Boca. Procedente de Chacarita, el volante nacido en Medellín jugó 18 partidos y lo hizo a gran nivel, aunque el equipo se terminó yendo al descenso y, el club, quedó al borde de la quiebra.

Al año siguiente, con Talleres en la B y ya administrado por la justicia, llegó el delantero Julián Mosquera García, quien apenas estuvo en seis partidos. Ya en 2007 arribó el delantero Oscar Eduardo Villarreal, y tuvo más continuidad. Pero los 13 partidos no le alcanzaron para convertir goles ni para hacer historia en Talleres.

Finalmente, el volante Alexander Viveros puso un pie en la entidad de barrio Jardín. Con 13 partidos, no hizo goles y despertó alguna simpatía en la tribuna. Los problemas con el peso también fueron una constante. Ahora, Pajoy la va a pelear en una zona muy poblada. Talleres es un reto; para el equipo, una esperanza.