Jugadores de Belgrano y Talleres estuvieron en el Hospital de Niños en una acción solidaria por el Día Mundial de la Fibrosis Quística. Gran gesto de los futbolistas.

Hay cuestiones que van más allá de los colores de un club de fútbol. Y eso se vio hoy en el Hospital de Niños donde un grupo de futbolistas de Belgrano y de Talleres se acercaron para llevarles algo de alegría a quienes padecen fibrosis quística. Organizado por Ganfii (Asociación Grupo de Ayuda al Niño y la Familia Fibroquística) encabezado por Ernesto Oviedo, papá de las mellizas Marisol (fallecida esperando su transplante) y Maribel.

Entre los futbolistas presentes, se destaca a Juan Carlos Olave, Mauro Óbolo, Mario Bolatti e Iván Etevenaux, de Belgrano junto a Nelson Benítez, Eial Strahman, Lucas Bovaglio y Victorio Ramis, de Talleres.

El goleador de la T fue, justamente, el que tomó la voz cantante de los representantes del club albiazul en esta jornada solidaria y, sin tapujos, dijo: "Uno se siente un boludo por las cosas que se queja, cuando ve como viven estos chicos. Nosotros representamos a mucha gente en Córdoba, es importante venir a estos lugares".

Coincidiendo con Strahman, también habló Óbolo, goleador pirata: "Hablamos con los padres y los chicos. Estar acá es muy lindo. Uno se preocupa por cosas que no importan"

Y el que también se refirió al tema fue Olave quien, junto a Gonzalo Klusener, son padrinos de la Asociación Ganfii. "Fue una experiencia enriquecedora, es un momento de alegría para todos ellos ver a un jugador de fútbol. Somos seres humanos que andamos en la calle como cualquiera. Esto está más allá de los colores. Cometemos, a veces el error de hacer tan grande a un resultado de fútbol que uno en estos casos ve lo chiquito que queda el fútbol. Estamos apoyando la lucha de la familia Oviedo, y de las familias que padecen este tipo de enfermedades", cerró el arquero de Belgrano.