Presidente electo de la “T”. Aunque asumirá el 2 de diciembre, ya trabaja con todo al frente de la institución. Busca un salto de calidad.

Andrés Fassi está acomodándose a su nuevo lugar en el Mundo Talleres. Fue preparador físico del equipo de Roberto Marcos Saporiti, levantó al Pachuca, se convirtió en un gran interesado en administrar el club albiazul y, tras dos intentos fallidos, pudo lograrlo el domingo pasado al ganar la elección de la “T”, que fue saneada días antes (2004-2014 estuvo quebrada).

El presidente electo asumirá el 2 de diciembre, aunque de hecho ya se puso al frente del club de barrio Jardín y su día a día se divide en la atención de dos frentes: Talleres en Córdoba y la entidad mejicana de la cual es vicepresidente, aunque aclara que en esta primera etapa estará más tiempo en Argentina que en México. En medio de tanta actividad, que incluye reuniones con plantel y cuerpo técnico, armado de grupos de trabajo, supervisión de infraestructura y viajes, ayer se hizo un espacio para visitar La Voz del Interior donde, minutos antes de partir a Buenos Aires, le dio una entrevista a fondo a Mundo D.

–¿Esto es un volver a empezar?
–Es una refundación del Club Atlético Talleres, después de los 100 años, donde la visión está muy clara. Debemos tomar un montón de elementos positivos que nos dejó la historia de Talleres y traer un salto de calidad distinto para hacer de Talleres un club de envergadura.

–¿Y para vos qué significa?
–Yo no lo analizo al tema como que yo tengo que demostrar o hacer… Yo me pongo en un plano de servidor. Llevo 35 años vinculado al fútbol y en los últimos 20 me acompaña un grupo de lujo que me permite venir a hacer un gran proyecto a mi ciudad y a mi equipo de toda la vida. No lo asumo como un reto personal. No es una situación de Andrés Fassi. Vengo a decir “juntos vamos a hacer esto”. Y el rédito pasa por una cuestión de la sociedad cordobesa, no como algo personal. Sí fue una decisión de vida, porque a nivel familiar va a ser tremendamente complicado. Pero estoy dispuesto a que ellos me ayuden a tomar este riesgo en pos del proyecto.

Sin pausa, al trabajo

Inicio. “Estoy contento, con mucha actividad. Nos habíamos anticipado un poco en algunas actividades, sobre todo en lo que hace al tema de visorías y el armado de la estructura de la gente que vendrá a trabajar en inferiores. Obvio, esto toma fuerza a partir del domingo con la puesta en escena de lo que viene. Ahora voy a Buenos Aires para definir lo de la gente que coordinará lo de abajo. En las visorías, tendremos tres en Buenos Aires, cinco en Córdoba y seis en el resto del país. Serán 13 o 14 visores bajo la coordinación de Edgardo Sbrissa, muy vinculado a las redes de formación”.

Asunción. “Esto tiene que tener una formalidad después de los 10 años que a Talleres le tocó estar en la Justicia, pero el reloj sigue avanzando y hay que ir resolviendo cosas a marcha forzada. Hay que ir avanzando pese a que formalmente la asunción sea el día 2. Hay un montón de cosas por resolver. De hecho viajo a Buenos Aires para ver el tema de la gente que va a estar en la estructura y va a traer toda la metodología de trabajo para el fútbol de inferiores. Prácticamente ya cerramos todo lo que es el tema de visorías. Y hoy (por ayer) estuvimos con los patrocinios, pero todo está un poquito atado a ver si Talleres va a estar en la B Nacional o en el Federal A. Eso cambia indudablemente algunas decisiones que se tienen que tomar al respecto, pero esperando y trabajando, apoyando al plantel. Estuvimos con el primer equipo y con Guillermo Hoyos, de cara al proceso que se viene, porque nos jugamos en pocos partidos la posibilidad del ascenso”.

Motivación. “Los premios (por ascender) ya están cerrados. Pero les dije a los jugadores que sirva de carácter y motivación, por más que yo creo en mi fuero más íntimo que el aumento de un porcentaje mayor de un premio que el jugador pueda llegar a tener no va a aumentar la motivación de jugadores y cuerpo técnico, porque tener la camiseta de Talleres te pone la motivación al 100. Que nosotros lo reforcemos con un mayor premio puede ser una motivación interna para ellos, para sus familias, pero definitivamente el vestir la camiseta de Talleres y la enorme responsabilidad que tienen todos de lograr el objetivo es única y es algo que poco a poco quiero ir permeando con ellos. Estuvimos charlando con ellos, con Hoyos y su cuerpo técnico para que vayan conociendo cuál es la visión institucional. Están muy compenetrados con lo que viene. De ahora hasta el final Talleres se juega mucho. Y ojalá que se dé porque sería un estímulo muy grande para ellos, para el hincha y para toda esta renovación”.

Contexto. “Lamentablemente hay mucho desorden. Esta situación de elevar la Primera División a 30 clubes trajo una serie de complicaciones que aún no están resueltas, están buscando alternativas. Se me hace difícil que una equivocación se pague con otra equivocación, que por llevar un torneo a 30, otro tan importante como la B Nacional se quede sin ascensos y sin descensos. Tenemos poca voz y voto y tendremos que aceptarlo. Y trabajar. Quiero darle a la gente el ánimo de pensar que no es condicionante para nada si el equipo asciende o no. Porque venimos con la misma fuerza, con la misma pasión, la misma visión, los mismos recursos económicos. Y armaremos un equipo lo más representativo posible”.

Primer discurso. “Se sacó un poco de contexto (lo que dijo de River y Boca). El mensaje era que venimos a hacer un proyecto distinto, que no sólo será con un nivel de gestión con trascendencia para Córdoba sino para el fútbol argentino. No quiero que se malinterprete ni que quede con un tono de soberbia. Vamos a trabajar fuerte y de forma organizada… Ahora, a hablar menos y a trabajar porque es mucho lo que viene en todos los aspectos: institucional, deportivo, de estructura… Hay que abocarse muy fuerte al trabajo y poco a poco empezar a crecer”.

Desafío. “Es un reto muy lindo, difícil porque de repente hay que romper culturas y paradigmas de muchos años, pero es parte de lo lindo. De la convicción que tenemos todos de llevar adelante un proyecto de esta envergadura. Sabemos que es complicado por la situación económica y social del país, la que atraviesa Talleres desde los últimos 10 años, en qué nivel está el termostato de Talleres, porque nos tenemos que hacer cargo de lo que está pasando”.

ANDRÉS FASSI Y EL ASCENSO. Ojalá se dé, porque sería un estímulo muy grande para el plantel, el técnico, el hincha y toda esta renovación. “Ahora, a hablar menos y a trabajar porque es mucho lo que viene en todos los aspectos: institucional, deportivo, de estructura… Hay que abocarse muy fuerte al trabajo y empezar a crecer”.

Apertura, sinergia y un código a respetar


“Hoy (por ayer) mi gente habló con Gustavo Lawson, porque queremos que se sumen todos. Queremos un club abierto, con sinergia, para hacer crecer esta institución, que no va a crecer en disidencia. Y en base a eso trabajar…”, explicó Andrés Fassi. Y respecto a esa apertura, amplió: “Pude hablar con Lawson, con Escalante... A Salum lo busqué pero creo que está fuera del país. Pero la idea es buscarlos y agradecerles todo el trabajo que hicieron, de entregar el club en foja cero para que nosotros hoy estemos aquí. Y decirles que están las puertas abiertas del club. Lawson dijo que con todo gusto se suma”.

–¿Qué pensás de la resistencia de alguna gente?
–Es normal. En un país donde el fútbol y su cultura tienen tanto arraigo, y donde tenés un sistema establecido por más de 35 años, es muy normal la resistencia al cambio. Hoy viene un cambio generacional y un cambio de forma en la administración de los clubes. Ya la empezó River, Estudiantes de La Plata, San Lorenzo… y ya la empezó Talleres. Viene un cambio de estructura en el fútbol.

– ¿Qué te preocupa de este Talleres?
– Me preocupa que no se puedan volcar tan rápidamente los logros deportivos, porque la estructura se va formando y ahí no hay margen de error. Después, preocupación no hay… Se está formando una sinergia increíble.

–¿Y el tema de la barra?
– En un marco de exigencia, de autoritarismo, no vamos a entrar de ninguna forma con nadie. Talleres tiene más de un millón de hinchas y mañana, por cómo está la Fiel hoy, puede haber un montón de otros grupos. La situación es tremendamente clara: a partir del 1 de diciembre va a haber una estructura institucional, un manejo de un código totalmente establecido y en ese telón están abiertas las puertas del club para el que sea.

–A Rodrigo (Escribano) lo resaltaste mucho…
– Es muy distinto a mí. Yo estoy mucho más relacionado a lo deportivo y él a lo administrativo y la mercadotecnia. Ese equilibrio puede ser tremendamente beneficioso en esta dupla.