Julián Maidana no se da por vencido y, a los 38 años, debutó en Villa Ascasubi, en el Torneo Provincial. "Me cansé de ofrecerme", dijo.

“No me quedó otra. Voy a jugar para Atlético Ascasubi, el Torneo Provincial. Ya está”, repetía una y otra vez Julián Edgardo Maidana, después de levantar la copa para celebrar su cumpleaños número 38.

Era el 11 de enero pasado y algunos amigos fanas le cuestionaban el hecho de que su carrera no fuera a terminar en Talleres, a poco de cumplir 12 años desde que vistió la albiazul por primera vez.

“Soñaba y aún sueño con retirarme en Talleres. Pero me cansé de ofrecerme a la gente. Solamente me llamaron cuando la pretemporada ya había empezado y me exigían que estuviera listo para el debut. No fueron de frente conmigo”, les argumentó más tarde.

Y así fue. El domingo pasado, el histórico capitán de Talleres, ganador de la Copa Conmebol 1999 e integrante del equipo que se clasificó por única vez a las copas Mercosur y Libertadores, se puso la aurinegra de Atlético Ascasubi por primera vez y fue titular en el empate 3-3 con Colón de Arroyo Cabral, en un choque de líderes de la Zona 3 de un torneo cuyo ganador va al Argentino C.

“El July” –también baluarte del Newell’s campeón del Apertura 2004, su otra gran referencia– debutó en la segunda fecha, porque no había sido habilitado para la primera, en la su nuevo equipo ganó 8-1.

Penal y expulsión. “Fuimos a jugar a Arroyo Cabral. Había como mil personas. Ganábamos 2-0, después se pusieron 3-2, y empatamos al final ¿Cómo jugué? Aceptable, salvo que cometí el penal y me expulsaron a los 20 minutos del complemento. Mal el juez (Alberto Rodríguez) porque la primera amarilla no la merecía. Nada más quiso sacar chapa”, dijo Maidana.

“¿La gente? Fuimos visitantes. Me insultaron bastante. Pero sé a qué me expongo. Me falta un poco de ritmo. Pero no voy a fallar. No vine a ‘robar’. Voy a cumplirles a todos”, agregó Maidana, quien tuvo bastante trabajo con Gabetta y Sandrone, los mejores de Colón.

Varias veces fue al suelo con sus cierres característicos, tal como lo hizo alguna vez ante Kaká (era del Sao Paulo) lo enfrentó con la “T” en la Mercosur 2001 o ante Caniggia (con el Livingstone de Escocia frente al Rangers).

Daniel Fonseca, el entrenador de Atlético Ascasubi, fue el que buscó a Maidana. “Sabíamos que no tenía club. Un intermediario me lo ofreció. Lo llamé a Julián y lo invité a comer un asado para mostrarle el club. Es muy valioso y alcanzará su mejor forma. Lo convencimos con el año empezado”, indicó el DT.

Maidana se entrena dos veces por semana (martes y jueves). Un régimen diferenciado que acordó para poder jugar.

“Hay un grupo bárbaro. Soy el más grande, pero me cambio al lado de los más pibes. Tengo un conocido Bruno Quaranta, es un pibe que prestó Talleres. También un colaborador del DT, que es fana de Talleres. Me dijo que me aplaudió y que también me insultó”, afirmó el ex jugador de Instituto, desde donde pasó a Talleres.

“No soy el capitán del equipo porque hay jugadores que tienen más años acá. A Fonseca le agradezco mucho. Igual que al presidente Ricardo Hesar”, dijo Maidana, quien arregló cobrar por partido hasta mediados de marzo. Serían un poco más de mil pesos por juego, según trascendió.

–En Talleres, ¿te pasaron la factura por conflictivo?
–Siempre luché por lo mío y lo de mis compañeros. No como otros capitanes que pensaban en ellos. Pero también me rompí el lomo. Mis ex compañeros me saludan todos.

–Se ve que no todos piensan igual...
–Yo me ofrecí dos veces para volver. Y no pedía nada. No exigía titularidad ni ser el capitán. Ni un gran contrato. Solo quería estar seis meses para retirarme tranquilo. En la era Ahumada, me limpiaron. Pero después volví en aquel partido con Tiro, en el que hice el gol que nos permitió ir a la reválida. Después Ateliers no quiso que continuara. Ahora se hicieron los desentendidos. Le ofrecí a la Fundación Azul y Blanco volver en septiempre y, luego, en octubre. Lo único que pedí fue que me contestaran a tiempo. Lo hicieron a poco de empezar el Clausura y tenían exigencias para que estuviera 10 puntos de cara al debut. Porque eso había dicho Rebottaro. No me fueron de frente. Pero qué sé yo. Quizá pueda volver. Ahora que se fue el jefe Lussenhoff.