Tras conocerse que su hijo quedó libre de Talleres, Daniel Valencia, dijo que teme que le ocurra "lo mismo que a los hijos del 'Hacha' Ludueña".

José Daniel Valencia no podrá ver hecho realidad su sueño de ver jugar en Talleres a su hijo. Ayer le comunicaron al “Dani” , de 15 años, que no será tenido en cuenta y “el Rana”, dolido y triste, lo atribuyó a un pase de factura por haber sido el vicepresidente deportivo de la Ateliers de Carlos Ahumada, la firma que concesionó el club hasta el 8 de setiembre pasado.

“Es un pase de factura. Ni más ni menos. Le avisaron esta mañana (por ayer) después haber hecho una práctica. Están mezclando todo. No quiero que pase lo que que ocurrió con los hijos de Luis Ludueña, que debieron irse a River”, dijo quien fuera uno de los referentes del Talleres de oro.

Desde el club nadie quiso contestarle. Sólo trascendió que el pibe habría sido seleccionado para ser declarado prescindible, junto con otros 110 chicos más (se redujo todo porque el club competirá a nivel local), por entrenadores y profesores que el propio Valencia habría tenido bajo su mando en la era Ateliers.

“Por más que sea mi hijo, tiene condiciones suficientes. Un profesor le informó que quedó libre. Esto es personal. Traje a Tomás Spinoza y lo quieren dejar libre. Igual que a Nicolás Armella.

¿Qué, no jugaron nunca? Es personal, el tema. No piensan en el club. Y el pibe no quiere volver”, se enojó “el Rana”.

–¿El coordinador Chazarreta no habló con tu hijo?
–Habló, pero con todos los chicos en general. Pero a veces reciben órdenes de los directivos y cumplen con eso. Me están pasando una factura. Es una falta de respeto. Es mi hijo. Creo que algo le di al club.

El malestar de Valencia fue propicio para repasar cuestiones inherentes a la responsabilidad que le cupo a Ateliers en el descenso de Talleres del 13 de junio pasado. Temas sobre los que Valencia recién se pronunció en esta oportunidad.

–¿Quedaste pegado con Ahumada?
–No quedé pegado con Ahumada. Pero tengo palabra. Dije que si se iba, yo también. No como otros que dijeron lo mismo y se quedaron. A mí me molestan las personas que ponen excusas. La traición me vuelve loco. Si estoy con Ahumada es porque vi lo que hizo. Las cosas que dejó. Ahora dejan la Boutique para ir al Chateau. No se entiende. Ya basta de todo esto. Basta de engañar a la gente. Ahora que se quieren llevar jugadores a España. Que nadie dice nada. Me llama mucha gente para preguntarme cuándo vuelve Ahumada. Antes era una familia. Ahora es cualquier cosa.

–Con la Ateliers de Ahumada el equipo fue a reválida, al año siguiente descendió al Argentino A y armaron el equipo que se quedó en ronda inicial. ¿Qué evaluación hizo como vice?
–Los resultados deportivos mandan. Mirá dónde estamos, con quién jugamos. Con todo respeto a los equipos. Tengo la conciencia tranquila. Lamentablemente hubo jugadores que no rindieron. Que no fueron lo que a nosotros nos vendieron. Se les dio lo mejor. Ganaban re bien. Tenían hotel cinco estrellas y concentrábamos en Carlos Paz. No le ganamos a nadie y nos fuimos al descenso. Nos equivocamos en la parte deportiva. Entiendo a la gente. Pero apuntábamos más arriba. Al predio para los chicos, a tener donde entrenar. nadie es perfecto.

–¿Que opinó cuando Ateliers decidió la recuperación de los bienes?
–Si dejé la casa con todos los muebles, no voy a permitir que me usen todo. Estamos en manos de gente que no sabe de fútbol. Son los fideicomisarios.

–¿Pero fueron los fiduciarios los que armaron el equipo que descendió?
–Está bien. Pero no dejaría a cargo del club a un chico de cuatro años. No lo entiendo. Como tampoco que digan que Ateliers se quiere llevar dinero.

–¿Qué piensa de la Fundación?
–Puede estar la Fundación, el Hospital, los hinchas. Lo que sea. Si hacen las cosas bien, bárbaro. Con Ateliers seguiremos trabajando. No le dejamos la mesa servida a nadie. Sigo con Ahumada y a más tardar volveremos en junio. Para ascender. Ahí me retiro.