"El Sapo" se reunirá el martes por la mañana con el plantel de la "T" para comunicarle si sigue como DT. Esperaba apoyo, pero no lo tuvo.

“La decisión se la voy a comunicar a los jugadores primero que a nadie”. Roberto Saporiti dejaba estas palabras a la salida de una reunión con los fideicomisarios Daniel Ruffener y Gustavo Eluani, en la sede de Talleres, donde iba a confirmar su decisión de dejar de ser el DT albiazul.

Lo que seguía al “voy a tomar una decisión” que se le escuchó decir después de caer 1-0 ante Juventud Antoniana y quedar eliminado anticipadamente del Torneo Apertura, el que ofrece la clasificación a las semifinales por el ascenso a la Primera B Nacional, era como un prólogo de despedida. Al final, postergó todo hasta hoy.

¿Por qué no se fue el lunes? Porque en las últimas horas albergaba la esperanza de que sus declaraciones provocaran un gran respaldo del cogobierno fideicomiso-Fundación en cuanto a la planificación del futuro trabajo y los refuerzos a contratar. Pero no lo hubo.

Los fiduciarios, quienes estuvieron acompañados por el asesor deportivo Fernando Albareda, le dijeron a Saporiti –tiene contrato hasta junio de 2010– que la eliminación anticipada afectará en los ingresos (si clasificaba, la “T” hubiera tenido dos partidos más de local). Además, le ratificaron que habrá un recorte en los casi 400 mil pesos del presupuesto mensual del plantel.

¿Y la Fundación? Estaban Nicolás Martínez Dalke y Diego Bedacarratx, quienes le dejaron entrever que el compromiso de la Fundación se limitará hasta fines del corriente mes.

Saporiti esperaba ver a Salum, el titular del grupo de auxilio económico del fideicomiso. Pero a esa hora de la tarde, el ex directivo, que fue al primero que le dijo que se iría tras el partido del domingo, estaba en Buenos Aires ultimando los detalles para viajar a Inglaterra.

Salum tampoco le garantizó que la Fundación vaya a continuar. No sólo porque el Tribunal Superior de Justicia, en breve, puede decidir que Ateliers vuelva a concesionar al club. Sino porque para seguir después de diciembre, la Fundación pretende tener más poder de decisión e independencia del fideicomiso. Algo que el juez Silvestre no contemplará hasta más adelante.

¿Y entonces? “Yo no renuncié”, dijo Saporiti, que se fue palpitando un escenario más incierto. Pero la decisión estaría tomada. Y no será fácil porque, como dijo en una entrevista publicada el domingo por este diario, Talleres será el último equipo que dirija. Hoy, a las 10, irá a la Boutique y tomará contacto con el plantel para darle a conocer su determinación. “¿Para qué se va a reunir con ellos? Uno se reúne cuando algo va a cambiar”, dijo un allegado al técnico.