Hugo García /
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Matías Quiroga le puso palabras a un pensamiento que hasta ahora solamente se había manifestado a nivel de los simpatizantes de Talleres. El volante albiazul considera que el partido ante Instituto es una final y que hay una gran rivalidad por tratarse de otro equipo cordobés. Pero para Quiroga, el partido del próximo lunes, en Alta Córdoba, no reviste el carácter de clásico.

–Se aproxima otro clásico. ¿Cómo lo vivís?
–No. Clásico fue el anterior (por el partido con Belgrano). Por ahí, al ser otro equipo de Córdoba, le llaman clásico. Pero para nosotros, no.

–Qué definición…
–No, no. Pero te lo digo tranquilo. Porque sabemos que es así. Sabemos que va a ser una final como la que jugamos en la Boutique ante Belgrano o como las que vienen de ahora en adelante.

–Entonces para vos el clásico es con Belgrano. ¿Así lo viviste desde que ingresaste al semillero albiazul?
–Sí, sí. Por ahí está la rivalidad por ser otro equipo de la ciudad. Es la realidad.

–¿Cómo los dejó el clásico con Belgrano, el martes pasado?
–Estamos bien. Nos dio un poco más de respiro. No ganamos, pero rescatamos un punto.

–¿Y futbolísticamente? ¿Cuál es el análisis de los partidos ante All Boys y Belgrano con respecto a los que jugaron con Tiro Federal y Defensa y Justicia, en los que ganaron y llegaron más?
–En esos partidos pudimos aprovechar las situaciones. Después, nos tocó empatar.

Rendimiento
Quiroga es un volante con gol. De hecho, lo ratificó en el 4-1 ante Tiro Federal, al marcar justamente el último tanto. Su llegada por sorpresa para convertir o tirar el centro atrás, lo hizo valioso. Sin embargo, en los últimos dos partidos lució más preocupado por marcar que en la llegada al arco rival.

"En el torneo pasado, al jugar con línea de tres, me privaba un poco de mandarme al ataque. Trataba de ayudar en el medio campo y abajo. En este campeonato, por el hecho de que hay cuatro defensores y cuatro volantes, me da la posibilidad de ser casi un delantero más", dijo.

–Ante All Boys y Belgrano no se dio así.…
–Sí. Primero trataba de cuidar mi arco y a la defensa. Primero defiendo y después ataco.

–¿Estás fastidioso porque no has podido convertir en los últimos tres partidos?
–Soy un volante. Mi prioridad es llegar por afuera y tratar de que los delanteros hagan goles. Es cierto que mi característica es la de hacer gol. Pero ya llegarán.