La máxima autoridad del Matador y todos los temas que interesan al socio e hincha. El objetivo está muy claro: que Talleres regrese al protagonismo deportivo e institucional.

Después de casi tres meses de estar en el exterior, el presidente de Talleres, Andrés Fassi, volvió esta semana a Córdoba dispuesto a cumplir, una vez concluida la cuarentena de rigor para quienes llegan del extranjero, con una frondosa agenda de temas vinculados a la actualidad de la institución.

Tras esa prolongada ausencia, hay mucha avidez en los hinchas y socios por conocer su opinión sobre varias cuestiones que son parte de su inquietud y a las que el titular albiazul respondió este sábado, en esta entrevista que le brindó a Mundo D.

–Talleres es puntero, tras 17 años, como consecuencia de una idea de juego y una política institucional. ¿Cuál es su reflexión como presidente e hincha?

–Como presidente del club, tengo una enorme y mesurada alegría. El objetivo está muy claro: que Talleres regrese al protagonismo deportivo e institucional. Para eso hay que tomar decisiones permanentemente. El balance es ampliamente positivo. En los dos últimos torneos locales peleamos las instancias finales y participamos en las dos competencias internacionales, Libertadores y Sudamericana. Hay una sola forma de seguir en ese camino: seguir consolidando al club. Para mí hay dos tablas de posiciones: la que marca lo deportivo, en la que hoy estamos primeros, fruto de una planificación muy pensada y de un entrenador con un estilo de juego que es el que le gusta a nuestros hinchas y con una vocación ganadora, en cualquier cancha. Con buena asociación, muchísima intensidad y un trabajo tremendamente solidario como equipo. Fruto también de un grupo de jugadores muy comprometido, que afronta cada partido como una final. Veremos en diciembre, tras la fecha 25 del torneo, para qué alcanzó todo este esfuerzo. El objetivo es lograr ingresar a una copa internacional en 2022 y llegar a lo más que se pueda en la Copa Argentina, en la que estamos a un partido de semifinales. Un torneo con muchas sorpresas y en el que ya hay equipos muy importantes fuera de competencia. Y en la que los equipos de la B Nacional terminan siendo rivales muy difíciles. Tenemos la ilusión de jugar un gran partido contra un rival muy complejo como Temperley y de llegar a semifinales. Después está la tabla de posiciones institucional, que es tan importante como la deportiva, porque es la que nos permite crecer como institución. En ella también Talleres es protagonista, por ser sustentable, por estar al día, después de dos años de pandemia tremendamente complejos en lo social y económico en el mundo y en los que pudimos mantener el sustento yal días a nuestros más de 500 empleados y sus familias. Con un estilo muy definido de gestión, que nos permitirá inaugurar, en unas semanas más, obras por más de 300 millones de pesos. Presentaremos un balance que será el más importante en la historia de Talleres, nuevas obras, nuevas incorporaciones, un alto nivel patrimonial y con una gran comisión directiva a la que estoy agradecido. Como presidente estoy agradecido a la confianza que depositaron en mí los socios, los hinchas, el cuerpo técnico y este grupo de jugadores, para transformar cada partido en una alegría para Talleres. El equipo juegue donde juegue, busca ser protagonista. Y un agradecimiento especial a todo el recurso humano del club, profesionalizado, que permite que Talleres no sólo siga de pie, si no también creciendo. Y como hincha me siento orgulloso de que Talleres regrese a los primeros planos. Los grandes referentes del periodismo nacional e internacional empiecen a poner a Talleres como un gran ejemplo a seguir, en toda su estructura de gestión. De esta mística institucional ya me hablaba mi viejo hace 50 años atrás, de ese Talleres protagonista, de valor, que debía internacionalizarse, del que el país empezaba a hablar. Y hoy el club regresa a esos valores históricos, que son los que nos permiten avanzar, crecer y soñar.

–El DT y los jugadores hablan públicamente de conseguir un título. ¿Usted coincide o prefiere mantener la mesura habitual e insistir con el protagonismo en el torneo y seguir siendo internacional en 2022?

–Yo pienso que no existe ningún equipo en el mundo que no tenga el sueño y la ilusión de ser campeón. Talleres en 108 años de historia nos ha dado muchas alegrías, satisfacciones y títulos, pero también soy consciente, y mucho más como gestor de 37 años en el fútbol, que todo llega cuando tiene que llegar. Y ya me ha pasado en los proyectos que me ha tocado emprender. La presión del título es para los equipos que tienen cuatro o cinco veces más presupuesto que Talleres, inclusive algunos seis o siete. Pero Talleres gracias a tener un gran entrenador y un grupo de jugadores tremendamente comprometido, nos está demostrando que no siempre el que más gasta es el que está mejor. Con mucho menos que otras instituciones, estamos haciendo mucho más. Y por supuesto que me ilusiono. Imagínense que hace seis años estábamos jugando el Federal A. Pero no me desespero, todo llegará a su tiempo. Yo sé que la presión del título es para los que más gastaron, para los clubes que antes de empezar el campeonato lo hicieron con el rótulo de candidatos a campeón. Siempre haciendo lo nuestro con esfuerzo y humildad en el día a día y transformando cada partido en una final. Ya después nos daremos que ese sueño algún día va a llegar. No le demos ese nivel de presión, ni a nuestro entrenador ni a los jugadores. La presión se las dejemos a otros y sigamos luchando por ser un solo Talleres. Talleres va a ser campeón del fútbol argentino. ¿Cuándo? Veremos. Vamos paso a paso y en la fecha 25 del torneo veremos para qué alcanzó todo este esfuerzo.

Hoy disfrutamos de estar primeros, de estar jugando bien y siempre con intensidad.Y cuando no se puede jugar bien y el rival cuenta, también aparecen otros atributos, como las ganas. Talleres tiene uno de los cinco o seis mejores planteles del fútbol argentino, a pesar de que a nivel presupuesto estaremos después del décimo lugar.

–Dónde lo tomó la noticia del liderazgo (el día de la victoria con Argentinos) y con quién estaba? ¿Cuál fue la primera imagen que se le vino a la cabeza? ¿Quién era Fassi en 2004, la última vez que Talleres fue puntero en Primera, y qué hacía en Pachuca en ese momento?

-Yo estaba en México. Entre 2002 y 2008 fueron los mejores momentos de logros deportivos del Pachuca en México, en torneos locales, copas internacionales y mundiales de clubes. Y siempre en relación a Talleres, con la ilusión de poder trasladar eso alguna vez a la realidad del club. Siempre soñé con dar una vuelta olímpica con Talleres y, por qué no, jugar un Mundial de Clubes. Ojalá lo podamos cumplir. Siempre lo sigo a Talleres en cualquier lugar del mundo que esté. Me ha tocado ver sus partidos en Asia, a las 3 o 4 de la mañana, en Europa a las 12 o 1 de la madrugada. Y ahora hacía más de cuatro meses que no podía estar con mis hijos porque estaba en el exterior. Lo primero que se me vino a la cabeza cuando llegamos ahora a la punta, fue pensar en la enorme satisfacción y orgullo de toda la gente. Y que después de tanto tiempo de sacrificar a mi familia, que es lo más sagrado que tengo, con tantos viajes, que es hermoso compartir con ellos un momento tan especial. Es un mimo, un masaje para el alma.

–¿Qué evaluación hace de la primera parte del mercado con la venta inédita a Alemania de Hincapié, la de Navarro y antes de Fragapane?

–Indudablemente que la primera evaluación que hacemos es resaltar la calidad de nuestros jugadores, la calidad del cuerpo técnico del “Cacique” que les permitió crecer, la importancia de todo el trabajo que hacemos en scouting y visoría para traer a los jugadores que llegan y que después le permitirán ser futbolistas de exportación. Y le doy una valoración muy significativa a lo que es nuestra vinculación con otras ligas del mundo. Hoy que Talleres tenga una gran consideración y respeto en la MLS, una de las ligas de mayor inversión económica en el mundo y con muchísimo scouting obervando el fútbol latinoamericano; o que la Bundesliga se haya fijado en Piero Hincapié -lo vinieron a ver en tres ocasiones- y lo que significa abrir a Talleres al mundo, es importantísimo. Tener relación con clubes ejemplares del mundo como el Bayern Leverksussen, con el Grupo City, con el grupo Red Bull, nos abre la posibilidad de que toda nuestra estructura sea vista a nivel internacional.

–¿Qué evaluación hace de la última parte con la oferta superadora por Duarte, más las propuestas a Oliva y Bullaude?

-Bueno, estos son algunos de los nombres que trascendieron. Para que se den una idea: en estos dos meses estuvimos en contacto con más de 35 jugadores para traer, en distintos puestos: central, volante ofensivo, volante defensivo, extremos... estuvimos buscando permanentemente las mejores alternativas, tanto en Argentina como en el continente americano y Europa. Habíamos hablado con Alexander sobre traer dos jugadores muy competitivos por puesto. Prácticamente se ha logrado en un 95 por ciento ese objetivo. Hoy Talleres tiene un plantel muy competitivo y en todos los sectores, y se ha generado una gran competencia interna. Se fue Franco Fragapane, pero llegó un jugador de jerarquía como Héctor Fértoli. Nos costó la salida de Federico Navarro, pero llegó un jugador como Villagra que, en lo personal, pienso que será uno de los mejores contenciones del fútbol argentino en un año o año y medio más. Es un jugador con todos los atributos y lo ayudaremos para que pueda explotarlos. Juan Cruz Esquivel es un delantero que muchos equipos de Primera División buscaban y uno de los goleadores de la B Nacional. Y vino a Talleres.

Y sí... claro que nos hubiera gustado traer algún jugador más. Estuvimos viendo muchas alternativas, pero al tomar una decisión hay que tener en cuenta que la vara en Talleres está muy alta. Se fueron tres jugadores significativos, pero llegaron otros tres jugadores de la misma jerarquía. Nos hubiera gustado empezar ya con ese recambio que tendremos que hacer en diciembre, pero hoy ya estamos trabajando en eso. Son pocos, pero hay jugadores que no son de la institución y se irán. Será fundamental hacer ese recambio para que Talleres sostenga el protagonismo. A veces yo veo una desesperación en la gente y me recuerda años atrás, cuando se fue Emanuel Reynoso. Se fue y parecía que se nos caía el mundo. Y lo mismo con Sebastián Palacios... y bueno, aparecen y vienen otros jugadores, potenciamos a jugadores de las inferiores y fuerzas básicas (sic). En Talleres ningún jugador llega o se va porque sí. Es algo totalmente planeado. Que a veces el hincha tenga inseguridad es lógico, pero después de tantos años en el fútbol tenemos el equilibrio para tomar este tipo de decisiones con un alto nivel de responsabilidad. Sabiendo que hay que vender para poder fortalecer el proceso de crecimiento institucional y de sustentabilidad y traer jugadores jóvenes que nos den un gran aporte económico en el futuro.

–¿Cómo recibió el DT el hecho de que no podrá contar con esos jugadores?

-Con respecto a eso es imprescindible aclarar que es extraordinario tener un entrenador que quiera el mejor plantel posible. El entrenador no tiene por qué tener la visión institucional completa. El entrenador cumple esa función y quiere tener los mejores jugadores. Y me parece extraordinario, pero es ahí donde se tiene que dar el equilibrio, entre un entrenador que cada vez quiere más y una visión institucional que es más amplia y que tiene que velar por todos los intereses del club. Me parece extraordinario que Alexander nos exija, pero bueno... soy el responsable de mantener ese equilibrio. Se fueron tres jugadores y sabíamos perfectamente que Fértoli iba a suplir muy bien a Fragapane…

–¿Se viene una reunión presencial con el DT, apenas salga de la cuarentena, Andrés? ¿Le hará una propuesta de renovación para que siga tras diciembre, la fecha en que caduca su contrato?

-Soy un convencido de que hay momentos para todo. Hoy no es momento de hablar absolutamente de otra cosa que no sea el futuro inmediato de Talleres. Hoy se debe pensar en cada una de las finales que le toca ir jugando. Es de vida o muerte el partido contra Patronato, en Paraná. Y así habrá que ir hasta fin de año. El contrato de Alexander vence a fin de año. Una vez que finalice nos juntaremos. Es uno de los mejores entrenadores que me ha tocado tener y que siempre tendrá las puertas abiertas de Talleres. Será un gusto para todos que continúe este proceso. Hoy debemos pensar en todo lo que nos estamos jugado en la Liga Profesional, en la Copa Argentina y en la clasificación a copas internacionales. En eso tenemos que estar unidos y congregados. Ya habrá tiempo para definir entrenadores, jugadores y todo lo que viene para 2022.

–¿Las obras en el predio que van a significar un antes y un después? ¿cuándo se inauguran?

–Indudablemente que así será. Vamos evolucionando hacia el concepto de alto rendimiento, de lo que requiere cada una de las áreas para poder competir al mejor nivel. La verdad es que nos da gusto ver cómo ese sueño que Amadeo Nuccetelli tuvo hace tantos años, hoy le podemos dar un espacio de jerarquía, para el entrenamiento de los planteles de todas las categorías. Además son importantísimos los trabajos que se han hecho en la sede y en la Boutique, con un gran sentido de pertenencia para los hinchas. Este comisión directiva ha podido cumplir con creces con las obras que nos planteamos allá por enero de 2015, con recursos genuinos, sin deberle un peso a nadie. El predio está recibiendo hoy la mayor inversión de su historia desde que se compró en la década del ‘70. Son 300 millones de pesos. Nos posiciona al primer nivel del país y es el puntapié inicial para que se conozca lo que será Talleres en materia de infraestructura.

–Se asentó Malatini, Romero suma minutos, viene Santiago Toloza. ¿Cómo ve a los pibes del club?

–La verdad que muy contento. Es importante pensar en la inteligencia deportiva que hay que tener en la visión de la gestión del club, para estructurar qué tipo de plantel tener, qué cantidad de jugadores tener y qué jugadores se tienen que quedar en un momento determinado. Hoy gracias a esas determinaciones estratégicas que se toman, tenemos jugadores muy importantes. Algunos de ellos volverán de préstamos a otras instituciones y otros serán un recurso significativo que Talleres tendrá a futuro. Es increíble el desarrollo que está llevando Ignacio Lago en México, haciendo muchos goles. El de Leo Godoy en Estudiantes y Augusto Schott en Platense, quien acá no iba poder sumar minutos. El de Fernando Bersano, el de Cristian Ojeda, Fernando Juárez, Catriel Sánchez en Atenas de Uruguay, Lautaro Guzmán en Aldosivi, Pablo Solari, un jugador clave en Colo Colo, Exequiel Beltramone... Joaquín Blázquez que está asentado como segundo arquero del plantel y que viene de participar en los Juegos Olímpicos... Gastón Torres, Toloza, Mateo Mamani, jugadores que están pidiendo su espacio. U otros como el mismo Matías Córdoba, el mismo Esquivel... vamos viendo como Talleres va haciendo crecer su patrimonio futbolístico. Más del 90 por ciento del plantel es propio. Tenemos 22 jugadores prestados y seguramente por varios de ellos habrá clubes que ejercerán opción de compra.

-¿ Qué expresión desde el corazón quería ofrecerle al socio y al hincha?

-Les hablo a los socios e hinchas con el corazón en la mano. En estos años dejé muchísimas cosas. Familia, amigos, calidad de vida... no siempre puedo estar, porque mis proyectos de vida están muy repartidos. Estoy iniciando un camino profesional en España, me estoy yendo de México, tengo una gran responsabilidad en el proyecto de Atenas de Uruguay, pero en Talleres sigo dejando el alma para que estemos lo más alto posible. Así es y así será mi vida. Teniendo que repartirme con otras responsabilidades. No soy los que fijo mi atención en los halagos o en las críticas. Sé los alcances que tengo y asumiré nuevamente el reto de presidir a Talleres por cuatro años más. Sé que este es un proyecto de muchísimos años y que Talleres, potencialmente, puede crecer muchísimo más. Pero las responsabilidades hay que compartirlas. Es injusto que muy pocos carguen con toda la responsabilidad. Tenemos que hacer un Talleres solidario, tenemos que llegar a los 75 mil socios, nos tenemos que comprometer entre nosotros. Es muy fácil, cuando las cosas no salen, esconderse detrás de un micrófono o de una red social, y criticar o insultar. Una vez más pongo el alma, mi vida, mis conocimientos, mi pasión, mis recursos, para hacer de Talleres el equipo que todos queremos. Pero tendrá que haber mayor responsabilidad. Como siempre, con el ejemplo que pongan nuestra comisión directiva, nuestros asambleístas y con el apoyo que necesitamos de nuestros hinchas y socios, para hacer un solo Talleres. La institución está por encima de todos. Los jugadores se van, los cuerpos técnicos se van y nosotros, los directivos, un día también le dejaremos el camino a los que vienen detrás. Pero es clave que en el presente y en el futuro, seamos uno solo. Así es como crecen las grandes instituciones en el mundo.