Susto. La “T” avanzó de fase tras pasarla mal contra Defensores de Pronunciamiento. Ganó por 3 a 2.

Está claro que muchos hinchas de Talleres no quieren a Frank Darío Ku­delka, el mismo que condujo al equipo hacia el último ascenso. Y, cada vez que pueden, se lo hacen notar, como en la presentación del equipo (es silbado) o en el entretiempo de ayer, cuando desde la platea Ardiles bajaban los insultos hacia él porque el resultado no acompañaba a la “T”. Ayer, en el triunfo albiazul 3-2 sobre Defensores de Pronunciamiento, volvieron a cargar contra el director técnico.

Sin embargo, el DT está con la estrella de su lado y los resultados lo siguen favoreciendo. Entonces, ¿quién puede reprocharle algo a quien consiguió el récord de partidos invicto para un club cordobés en torneos de la AFA?

Llegar a 23 partidos invicto entre el Federal A y la B Nacional, más Copa Argentina, no es casualidad. Algún mérito habrá para este técnico que, más allá del método, fue ganador en todos los clubes donde pasó.

Características que se le reconocen a los equipos de Kudelka son el orden y la solidez. Por ahora, el Talleres 2016 no logra adquirir esas virtudes.

Porque se desordena cuando ataca y queda mal parado para defender, como pasó en los dos goles de anoche de Defensores de Pronunciamiento.

Sus líneas quedan separadas y Rodrigo Burgos a veces no alcanza a ser el bombero que apague todos los incendios.

Pero lo bueno que tiene –y que lo diferencia de los demás equipos– es que dispone de una amplia gama de variantes de alta categoría.

Y ayer apareció Emanuel Rey­noso, para hacer su mejor partido en Talleres, con un golazo incluido; o la ratificación de que Nazareno Solis pinta para crack. A pesar de que perdía dos veces, logró igualar.

Cuando estaba 0-1, la sorpresa en el Kempes era que la serie iba a penales; y cuando iba 1-2 había nerviosismo porque quedaba eliminado.

Por eso, el tiempo que pasó entre los 22 minutos del primer tiempo (segundo gol de Lautaro Robles) y los 6 del complemento (el tanto de Solis), con el entretiempo al medio, contribuyó para que los hinchas albiazules fueran presa de los nervios.

Y para completarla, al final, Aldo Araujo pudo celebrar su regreso con un gol: definió una enorme jugada que fue gestada a puro toque.

En todo su ciclo, el equipo de Kudelka sólo perdió un partido. Fue frente a Deportivo Maipú por la 14ª fecha del Federal A.

En este invicto de 23 partidos, el equipo de Kudelka ganó 16 encuentros y empató los siete restantes juegos.

Cuando la voz del estadio nombra a los protagonistas, el público regala aplausos con distinta intensidad. Y Kudelka se lleva silbidos. Los hinchas no están obligados a querer a su entrenador.

Mientras tanto, el equipo gana y se muestra superior a sus rivales a partir de la jerarquía individual de sus jugadores. Esa jerarquía que anoche apareció y sirvió para ganar el partido. Por ahora le alcanza.

Lo que viene

32avos de final. Después de que comenzaran 75 clubes y que queden 64, Talleres se clasificó anoche a la fase previa a la disputa del cuadro final de la Copa Argentina.

¿Un clásico? Según quiénes se clasifiquen, la organización de la Copa suele armar los cruces de los partidos de acuerdo a la proximidad geográfica o, si pueden disputarse clásicos, para poder hacer buenas recaudaciones. Así, podría enfrentar a Belgrano o a Instituto.