Facundo Chapur es piloto del Súper TC2000 y fanático de la T. Su compañero, Facundo Ardusso, es de Las Parejas.

Talleres pretende acelerar a fondo en la recta final rumbo al reducido por el ascenso, para dar la vuelta a fin de año y dar un volantazo a su realidad futbolística. Si lo sabrá Facundo Chapur, campeón de automovilismo y fanático de la T. Y también lo sabe su compañero de equipo, Facundo Ardusso, quien lo secunda en el Fiat de Súper TC2000, es hincha y fue futbolista del Sportivo Las Parejas, el rival de esta noche.

En el partido de ida, se desafiaron mutuamente en los micrófonos de Radio Impacto, y fue para Chapur. “Me debe el asado, y todavía no pagó ni un choripán. Si quiere jugar otro ahora, será con el fernet y la coca también”, lanzó el cordobés con la típica picardía futbolera.

“No venimos bien en la tabla, pero no voy a arrugar. Le juego otro asado. Es verdad que le debo el primero, estoy esperando que venga a Las Parejas a comerlo, no pretenderá que encima se lo lleve a Córdoba, metió el rebaje Ardusso. Es que Chapur confiesa que conoce Las Parejas sólo “de pasada”.

“En el partido de ida tenía carrera en Rosario y no pude ir. Ahora me tocó competencia del Turismo Nacional en Concordia, así que lo vamos a escuchar por la radio”, se conformó el piloto, campeón en 2013 en Turismo Nacional, el año del ascenso albiazul.

“Ahora voy primero en el Súper TC 2000 y a fin de año vamos a ver si festejamos por partida doble con Talleres. Si se da, me voy de festejo y no vuelvo más (risas)”. Arusso sí fue a la cancha en Las Parejas. Su padre es secretario del club y él jugó y debutó en Primera a los 16 años como enganche. “A los 17 empecé a correr en Karting y agarré por ese lado”, explicó. “La visita de Talleres fue lo más importante en la historia del club. Ahora quedaré con las ganas de ir al Kempes porque compito en Top Race en Paraná. Va mi hermana Franca y viajarán unos 200 hinchas más”, anticipó el “copiloto” de Chapur, que quiere que corran parejo.

Con el Papa

En 2014, Facundo Chapur fue designando junto a otros pilotos de la categoría para viajar al Vaticano y conocer al Papa Francisco. “Un momento irrepetible. Le regalé la camiseta de Talleres”, evocó.