Empate en Tlaxcala. Recibir a la “T” fue un hecho histórico para la ciudad que está a tres mil metros sobre el nivel del mar. Kudelka valoró el rendimiento

Bien temprano comenzó el día de Talleres en el que disputó su primer amistoso en México, donde empató 2 a 2 con los Coyotes de Tlaxcala, del ascenso mejicano. A las 6.50 de la mañana los utileros y el equipo que jugó el encuentro previo al central de la jornada ya estaban preparados y listos para subirse al ómnibus para recorrer los 150 kilómetros que separan Pachuca de Tlaxcala.

A las 9, la primera parte de la delegación ya ingresaba en el estadio al cual llaman popularmente “la Cueva del Coyote”. Mientras, en las tribunas se armaba la fiesta para lo que fue “una jornada histórica para este club”, según aseguraron los propios organizadores.

El reducto de este club que maneja Grupo Pachuca tiene una linda presentación, con butacas nuevas en plateas y con un vestuario pequeño, pero con todas las necesidades para albergar a una delegación visitante. Teniendo en cuenta que Tlaxcala juega en la tercera división del fútbol mejicano, sus instalaciones y la capacidad para siete mil personas son aceptables si se comparan con clubes de similar categoría en Argentina.

A poco más de media hora para que comience el juego empezó a llegar el grueso de la gente que le dio un marco espectacular a la jornada. Mientras un hombre de unos 60 años, con canas, flaco, de jean y camiseta de los Coyotes se paseaba por dentro del campo de juego cantando y agitando al público para que aliente a su equipo, un grupo del carnaval que se realizó en Tlaxcala entre el 12 y el 17 de este mes comenzó a actuar.

Lo particular de estos casi 50 bailarines es que eran todos hombres, aunque la mitad hayan estado vestidos de mujeres. “Es un grupo característico de acá. Bailan hombre con hombre”, contó un mejicano mientras le invitaba a la prensa cordobesa una michelada. ¿Qué es la michelada? Una bebida típica que varía dependiendo la zona. En este caso tenía agua, limón, chile en polvo, clamato y jugó de tomate y almejas. También puede llevar pimienta, cerveza, hielo y otras cosas más. Dentro de la cancha también se venden gaseosas y cervezas. A la hora de comer uno puede optar por un choripán (si es argentino pídalo sin picante) o por papas enchiladas (papas fritas con chile) o chilotes, entre otras cosas.

Además, la ciudad de Tlaxcala es una de las más cercanas al volcán Popocatépetl, que actualmente lanza a diario cenizas y vapor que, dependiendo como esté el viento, puede llegar en gran proporción. Además, está ubicada a tres mil metros por encima del nivel del mar.

Dentro de este contexto, Talleres llegó para disputar su primer amistoso en su estadía en México y los de Frank Darío Kudelka se fueron no sólo cansados por el calor que hizo (se jugó a las 12 mejicanas), sino que también conformes. Más allá de los malos primeros tiempos en los dos encuentros (en el primero la “T” cayó 1­0), la influencia de la altura y el buen complemento de ambas formaciones.

“Creo que la altura nos afectó en esos 45 minutos iniciales de cada encuentro. Los jugadores se ahogaron con el aire, pero cuando nos acomodamos en el segundo tiempo, fuimos superiores . Además hay que ver que ellos hace varios meses traen nivel de competencia. Estoy tranquilo por lo que se vio”, dijo el DT.

En medio de una jornada tan particular como interesante Talleres siguió sumando minutos de fútbol de cara a la puesta a punto del próximo Federal A.