Con presencia. La T mostró una mejor cara en el Kempes y le ganó 3-1, con mucha autoridad y ratos de buen juego a los mendocinos.

Fue como ese tipo que sintió que perdió autoridad. Que necesitaba meter un par de gritos y meter un puñetazo en la mesa para decir: “Acá estoy yo”. Y así le pasó a Talleres. Luego de una semana plagada de dudas sobre la continuidad de Cacho Sialle como DT después de perder sin poner ni las manos en Tucumán el miércoles, tenía que mostrar carácter.

Y pucha si lo mostró. Le ganó 3-1, con claridad, a Independiente Rivadavia y disipó, otra vez, los negros nubarrones que siempre oscurecen el panorama cuando no andan bien las cosas por el club de barrio Jardín.

Los goles de Agustín Díaz, Gonzalo Klusener y Juan Sánchez Sotelo sirvieron para marcar esa presencia que hacía falta. Ni el descuento de Diego Tonetto pudo opacar el triunfo de la T.

Después de un tímido arranque, sobre los 20, el equipo que ayer fue dirigido por Héctor Chazarreta se empezó a hacer cargo de todo. Carabajal, por derecha, conectó con Barrionuevo y el ex Sportivo mostraba el camino. A los 23, en una jugada parecida, Sánchez Sotelo habilitó a Díaz que definió con suspenso para el primer grito que iba poniendo las cosas en su lugar.

Lo de los mendocinos fue muy tibio. Recién a los 30 se animaron a patearle al arquero Santillo. Por las dudas, antes que reaccione, Talleres metió la segunda prueba de carácter. Fue justo a tres del final de la etapa con Klusener cabeceando al gol, casi la primera que tocaba. El 2-0 calmó a los hinchas y a los jugadores que pudieron meter el tercero si Ayala no le tapaba un tiro libre a Carabajal sobre el final.

Dudas despejadas. En el complemento, los mendocinos descontaron rápido por un lindo gol de zurda del volante Tonetto, a los dos minutos y el Kempes se llenaba da dudas. Pero, a los siete, con Barrionuevo asistiendo y Sánchez Sotelo definiendo de derecha en una contra letal, se despejaron los murmullos de temor al empate. El 3-1 volvió a hacer respirar a la T.

A pesar de alguna que otra revolcada de Santillo y las expulsiones de Brítez Ojeda y de Renzo Vera, el triunfo estaba en la bolsa. Porque la T tuvo el carácter que hacía falta. Porque se plantó frente a un rival que venía bien y lo superó dejando una buena imagen.

El árbitro. Nicolás Lamolina. Se equivocó en anularle un gol a la T pero acertó en las expulsiones y en no sancionar un penal a los mendocinos.

El 1X1


»Santillo (8). Tuvo tres atajadas fundamentales.

»Burgos (5). Alternó buenas y malas por su sector.

»Avendaño (6). Anuló a Rossi, el 9 rival. Buen trabajo.

»Vera (5). Tuvo una buena tarde pero lo arruinó su expulsión.

»Bazzi (5). Le costó tomar su marca por su sector.

»Carabajal (8). Gran partido. Desborde y desequilibrio.

»Brítez Ojeda (5). Siempre bien ubicado pero su tarea se desdibujó con la expulsión.

»Díaz (7). Buen partido y gol en el primer tiempo, se cansó en el segundo.

»Barrionuevo (7). El mejor partido desde su vuelta a la T.

»Sánchez Sotelo (8). Desniveló por todos lados y metió otro golazo.

»Klusener (7). Gol y sacrificio. Cumplió como siempre.

»Leyes (5). Entró a colaborar. Corrió y metió.

»Bottino (-). Jugó 15 minutos y aportó piernas.

»Tévez (-). Sólo cinco minutos.