El 9 de Talleres fue letal en el torneo. Habla de lo que vivió y de por qué quiere seguir en la T.

El domingo estaba recaliente. No lo podía creer. Aunque sabía bien. Que la roja ante Maipú lo había sacado de la escena, aunque no de la fiesta. Pero Gonzalo Klusener, una de las figuras excluyentes del ascenso de Talleres a la B Nacional no acumula ningún reproche: es el goleador de la categoría con 24 tantos.

La bestia del gol vivió un gran día ayer, a pesar de haber visto el partido desde la tribuna, el triunfo ante San Jorge de Tucumán. “La verdad que me incomoda más ver y sufrir desde las tribunas, pero bueno, fue así. La felicidad que tenemos en este grupo es enorme. Lo que más merecían esto eran los hinchas, el cuerpo técnico y nosotros que nos rompimos el alma para conseguir el ascenso”, dijo a Día a Día, el artillero albiazul.

“¡Gozalo!”, Gonza. Gozalo de verdad. Y ayer, el 9 honró su gran momento con la vuelta al trabajo.

“Quiero seguir haciendo goles en Talleres”, agregó el delantero.

Klusener, si el destino se lo permite y si él toma la decisión de estacionarse en barrio Jardín (igual hay una instancia de negociación que se debe cerrar primero), puede estar llamado a ser un nuevo “ídolo” en Talleres. Hay un vacío de referentes en el club, aunque con el regreso de Javier Villarreal se le dio la identidad al equipo en el sentir albiazul.

Pero es Klusener, un gran protagonista, quien podría dar un giro a su carrera. Por el hecho de seguir lo dice claramente: “Me gustaría continuar, hay que hablar con el club. Todavía falta”.

Talleres tiene la chance de hacer uso de la opción por la compra de su pase y, con ello, un contrato que podría llevarse a cabo si es que se sostiene la idea acordada en junio pasado. Aunque no quiere hablar ni de números, ni de un nuevo contrato aún, Gonzalo se siente a gusto en la ciudad, casi como un albiazul más. “Yo estoy cómodo en Córdoba, estoy contento con Talleres, me siento muy bien en la institución. No exijo mucho en los lugares que vivo, pero disfruto de Córdoba”, rescata.

Un cambio en la relación. Klusener, decididamente, fue cambiando su discurso. Durante un buen tiempo fue muy medido del hincha y de la institución. Pero, de a poco, su relación con Talleres se fue profundizando. “Siento un aprecio muy grande del hincha. Me siento muy cómodo en Talleres y comprometido con su realidad. Percibo mucho el afecto de la gente. Es un club grande que hay que entenderle un montón de cosas”, asegura el 9 de la T.

¿Hay lugar para la ilusión, para pensar en algo más allá de este ascenso? “Es entendible en que el club ya esté pensando en el Nacional B. Si bien faltan dos fechas, se disfrutará una semana más, dos y los que manejan el club tienen que anticipar cosas. Prepararse para los nuevos desafíos”, destaca el goleador de la T.

“Hay que mentalizarse”, dice Gonzalo, ir moldeando el futuro inmediato. Y ese futuro es la Copa Argentina. El partido de mañana, en el que Talleres también tiene cosas en las que pensar.

–Si le ganan a Sportivo, ya están en octavos...
–¡No! Pará un poco, hay que jugar contra Sportivo (el jueves). Uno sabe que este tipo de torneos, entre empates y definiciones por penales puede darle chances a cualquiera. O jugando y ganando bien como lo hizo Estudiantes de Caseros ante River. Pero esto ya es otra cosa...

Nada de pensar en locuras, aunque Klusener sabe: “En fútbol todo puede pasar, por eso es tan hermoso”. “Hay que pasar el jueves, ojalá que nos toque al menos ilusionarnos, pero nada más”, reafirma.

–Entonces, ¿cuando firmás?
–No, falta para eso, ojalá que pueda quedarme en Talleres. Me contagia todo lo que nos está pasando para pensar en una mejor expectativa, en un futuro. En fútbol uno nunca sabe. Soñar podemos soñar todos. No será fácil, pero en algún momento nos permitimos soñar.

–¿Y Sialle qué les dijo?
–Cacho nos felicitó a todos, agradeció. Nos dijo que podríamos haber ganado por más goles, ja, ja, y tiene razón.

Klusener parece hoy un delantero hecho a la medida del hincha de Talleres. Queda en él y en el destino. Pero él sabe que lo quiere escribir hace rato.

“La felicidad que tenemos en este grupo es enorme. Lo que más merecían esto eran los hinchas, el cuerpo técnico y nosotros que nos rompimos el alma”.

“Me siento muy cómodo en Talleres y comprometido con su realidad. Percibo mucho el afecto de la gente. Es un club grande y hay que entenderle todo“.

Futuro. Klusener quiere seguir y el club debe hacer uso de la opción por la compra de su ficha o un porcentaje.

El dato. 24 gritos. Gonzalo aún tiene un partido (puede ser ante Santamarina en dos domingos) para engrosar su gran cifra de goles con la camiseta de Talleres.