Guillermo Cosaro, defensor del albiazul hoy en Unión de Santa Fe, cuenta que le vino bien el cambio de aire, a pesar de ser suplente.

Apenas disputó un partido, cumpliendo su sueño en Primera División (ante Newell’s, jugó los 90 minutos, de lateral izquierdo), aunque llegó a consolidarse del todo. Aquel pibe de la cantera de Talleres con proyecciones, sorprendió a muchos cuando le salió la chance de sumarse a Unión de Santa Fe, cuando había perdido su espacio en el Argentino A. Tras tres temporadas alternando (la mayoría de las veces jugando), defensor que más goles anotó en la tercera categoría con la camiseta albiazul (11 tantos). De todas maneras, mucho se habló de la necesidad de cambiar de aire, y con sus 23 años, le salió la posibilidad a la máxima elite nacional. “La verdad, estoy cómodo en Unión. Era el momento de un salto, de un cambio, porque necesitaba limpiar la cabeza un poco. El Argentino A es un torneo desgastante. Entonces, hablé con los dirigentes y me dejaron salir, a préstamo. No jugué mucho pero voy a seguir luchando por una posibilidad”, cuenta Cosaro a LA MAÑANA, cedido a préstamo sin cargo, con opción de 250 mil dólares el 50 % del pase

- ¿Seguís la campaña de Talleres?
- Claro que sí. Me veo todos los resúmenes, lo escucho por radio, y creo que está encaminado. Este año no veo un candidato fuerte como otros campeonatos, se le tiene que dar. No pude ir a la cancha, fui un solo día a Córdoba y jugaba de visitante.

- ¿Tenés contactos con tus compañeros?
- Con (Federico) Costa, Agustín Díaz, Nery Leyes. Hablamos seguido, me cuentan del club, eso me pone un poco al día. Estoy al tanto.

- ¿Cómo fueron estos seis meses en Unión?
- Duros, hay que trabajar mucho. Estamos luchando por la permanencia, a pesar de que estuve de titular un solo partido, creo haber cumplido. Después el DT define a quien pone y a quien saca. Tuve mucha continuidad en Reserva. Pasaron dos técnicos, hay mucho por remar todavía. Pero la experiencia de estar en Primera División es algo que siempre soñé y la voy a seguir peleando, nadie me regaló nada.

- ¿Te fuiste bien de Talleres?
- Me pasó de todo en tres años. Tuve la oportunidad de jugar bastante, convertir muchos goles, me adapté de central, de lateral izquierdo, hasta de volante por ese sector. Pero después las cosas no me salieron. Tuve un bajón futbolistico, lo reconozco, por eso, cuando me vino la chance de cambiar de aire, no lo dudé porque lo necesitaba. El argentino A es muy cansador, la verdad. Tuve muchas frustraciones a nivel personal, la presión de ascender a veces te deprime. Eso me pasó.

- A veces, los jugadores del club son los más relegados...
- Eso pasa en todos lados, pero no me quejo, son las reglas del juego. Así es el fútbol.

- ¿Sabías que remodelaron la pensión?
- Si, me contaron los pibes. Por suerte nunca estuve en la pensión, lo digo porque hubo épocas que pasaban frío, hambre, calor, con la comida en mal estado. Yo dormía en las instalaciones de la Agencia Córdoba Deportes. Es mucho mejor que dormir en un batallón con los soldados, como le pasó a muchos compañeros. Me alegro que se haya invertido en eso.

Cosaro le tiene fe a Talleres


“Creo que este año se le tiene que dar. Tiene buen DT, buen plantel, no veo grandes candidatos y Talleres siempre genera mucho. Todos le quieren ganar. Creo que para el Centenario, va a poder lograr ese anhelo”, exclamó Cosaro, cuando se le preguntó su óptica sobre las posibilidades del albiazul de volver a la B Nacional. “La gente tiene que estar tranquila, aunque es entendible la impaciencia. El jugador debe abstraerse de lo que pasa afuera y mentalizarse adentro de la cancha. Sino, es mucho castigo”, agregó.

- ¿Vas a volver a Talleres?
- Seguramente, espero que cuando esté en otra categoría. Por el momento quiero seguir con mi sueño de jugar en Primera, pero alguna vez volveré. Se extraña mucho la gente, eso de jugar con 35 mil personas no se da en todos lados. Ahora todo depende de mí, si quiero seguir en Primera tengo que demostrar mis cualidades.