Fabio Álvarez se apresta a ser titular el domingo en el debut en San Francisco, y dialogó con PODIO sobre su historia en Talleres, sus sueños y presiones. “Siento que he crecido y madurado”, dijo el juvenil de 19 años.

Muchas expectativas se armaron en torno al juvenil Fabio Álvarez en Talleres. Porque a pesar de sus jóvenes 19 años, siempre dio que hablar, desde cuando algunos intermediarios lo querían “soplar” del Albiazul a sus 17 años, para colocarlo en el exterior, y después, merced de algunas apariciones, acompañadas de goles también. La cuestión es que siempre tuvo que luchar por una continuidad que pocas veces estuvo garantizada. Hoy, en el esquema elástico que propone el DT Arnaldo Sialle, ocupa el sector izquierdo, pero con funciones cercanas a un enganche, sin tanta mecánica. De todo eso, habló Álvarez con PODIO, quien será titular en el debut ante Sportivo Belgrano en San Francisco, aprovechando también que el volante Marcos Carrasco arrastra una fecha de suspensión del torneo pasado en Racing. “No sé si me tocó madurar de golpe, pero este campeonato te exige que siempre estés disponible y con ganas de dar el 100 por ciento, la oportunidad puede nacer en cualquier momento. Eso aprendí en estos años, siento que he crecido en ese aspecto”, contó Álvarez.

- ¿Pensás que te jugó en contra el hecho que se pusieran tantas expectativas en vos, siendo tan joven? ¿Qué se hablara tanto de uno con pocos partidos?
- No sé bien la verdad, yo tengo en claro que soy joven y que tengo mucho que aprender todavía. Trato de mantenerme ajeno a todo lo que se dice, a las críticas, a los elogios, a todo porque eso depende del trabajo que hace uno todos los días. Estoy tranquilo y eso es importante.

- ¿Y el hecho que Unión de Santa Fe se haya fijado en vos?
- Yo tengo la mente puesta en Talleres. Es un honor que un equipo de Primera se haya fijado en mí, pero si no se dio esta vez, será en otra ocasión. Si mantengo mi rendimiento y sigo haciendo las cosas bien, van a existir otras posibilidades en el futuro. Yo estoy cómodo en Talleres.

- En este sistema de 4-3-3, se te ve por izquierda y por el medio, ¿qué te pide el DT?
- Arranco pero también estoy cerrado, no como volante pero sí un poco más suelto cuando tenemos la pelota en nuestro poder, para así juntarnos y jugar. Cuando la perdemos, tengo la responsabilidad de volver y dar una mano. Somos solidarios.

- Pero tus condiciones no son de volante central, como lo hicieron otros intérpretes...
- Siempre fui enganche desde las inferiores, no tanto doble cinco pero me puedo ajustar. Yo tengo la obligación de ir al ataque, aunque también con la responsabilidad de ubicarme al lado de Javier Villarreal en pos de dar una mano en la marcación.

- ¿Esperás que este año sea definitivamente el que te consagre?
- Uno siempre tiene ese sueño. Yo espero que este sea mi año y el de Talleres también. Ojalá logremos el ascenso, la venimos peleando hace tres años, esta vez se nos tiene que dar. Y vamos a luchar y dejar todo para que lo logremos.