El Fondo y el Comité de fútbol de Talleres quieren aplicar el modelo del club “Granate” en barrio Jardín, como proyecto deportivo. Por tal motivo, el jueves Graieb y Albornós se entrevistarán con dirigentes y coordinadores de aquella institución.

Más allá de que el objetivo inmediato de Talleres tiene que ver con la búsqueda del nuevo entrenador del plantel superior para que suceda al despedido Ramón Cabrero, existe un proyecto paralelo que apunta al crecimiento institucional. Por eso, el flamante Comité Asesor de Fútbol que trabaja con el Fondo, tiene previsto reuniones y entrevistas en Buenos Aires este jueves con representantes del modelo que se busca aplicar en barrio Jardín: es decir Lanús. “Consideramos que la metodología de trabajo y los recursos para afrontar el proceso que vive Talleres, lo mejor es imitar las políticas que utiliza Lanús. Un club no se reconstruye de un día para otro. Más allá de que queremos ascender a la B Nacional, no queremos abandonar el proyecto de formación que le va a dar réditos al club en algunos años”, contó Diego Graieb, gerente deportivo del albiazul en una charla con PODIO.

- ¿Por qué Lanús?
- Demás está decir que es uno de los clubes que mejor trabaja en las divisiones formativas y que aportó una gran cantidad de futbolistas al mercado europeo. Es un ejemplo a seguir. Su proyecto actual le tomó casi siete años en conseguirlo, con un campeonato y paso por las copas internacionales. Apostamos a tener los mismos resultados, aunque sabemos que el hincha quiere ascender ya y todo esto queda de lado. Nuestra política es apuntalar a las categorías formativas, y tener, al igual que Lanús, un plantel con 80 por ciento de jugadores propios.

- ¿Se puede aplicar ese modelo en Talleres, con tantas urgencias?
- Claro que se puede. En Uruguay, en Rampla Juniors, estuve tres años y quise aplicar el mismo modelo de Lanús y el primer semestre costó una enormidad. Actualmente, hay 70 por ciento del plantel propio. Y no había nada. Talleres ya tiene los cimientos del proceso, la necesidad de identificarse. Hay ganas de trabajar y solo con un proyecto serio y sostenido, vamos a poder resembrar la institución.

- ¿Con quien va a dialogar?
- Con el presidente Nicolás Russo, con el coordinador Ramón Cabrero, con el encargado del fútbol amateur Fabán Soudeste, entre otros. Voy con Daniel Albornós, así observa las metodologías de trabajo y empezamos a aplicar eso en Talleres. Queremos formar nuestros entrenadores, nuestros profesores. Y lo más importante, vamos a trabajar de manera integral, con psicólogos y nutricionistas. A partir de la 6ª categoría, van a tener el mismo plan fuerte en la parte física y la coordinación, para que no sea tan abrupto el cambio de las formativas a Primera. Además, mi hermano Rodolfo, ayudante de campo del plantel superior que dirige Gabriel Schurer, me puede facilitar accesos y contactos.

- ¿El hecho de no competir en AFA en juveniles, complica?
- Sin duda, nos quedamos sin roce, necesitamos mayor competencia y por eso, para medir nuestro progreso, vamos a disputar al menos una vez al mes un amistoso a Buenos Aires, y también por el interior del país. Eso va a acelerar el ritmo. Ahora hay que dar el primer paso.