Arranca. Se armó una mesa directiva para debatir. El miércoles, en Buenos Aires, se sorteará el fixture.

Estaban todos unidos. Habían decidido, de común acuerdo, “no jugar si alguno de los clubes no estaba en condiciones económicas de afrontar el Argentino A”. Sin embargo, esa camaradería parece haberse quebrado. Ayer venció el plazo para los equipos que decidieran renunciar al certamen. Hasta anoche, no habían llegado a AFA las notificaciones formales y los 24 equipos disputarán el campeonato que el miércoles dará a conocer el fixture. ¿Qué pasó con los reclamos de los dirigentes del interior? ¿Y la decisión de no iniciar el torneo? Todos van a jugar y quedó conformada una mesa directiva compuesta por los directivos del Argentino A, que será presidida por Bernardo Abruzzesse, vicepresidente de Central Córdoba de Santiago del Estero. La mesa servirá para seguir debatiendo los fondos económicos pensar en cómo encarar gastos y acercarse a la profesionalización del certamen.

La crisis arrancó un mes atrás, cuando los dirigentes, reunidos en Buenos Aires, pidieron un aumento del subsidio para engordar la economía de los clubes. Trazando un paralelismo con la Primera B Metropolitana, los clubes del interior del país reciben una sexta parte en lo referente a derechos de televisación (24 mil pesos mensuales, contra 120 mil) luego de la firma del contrato del Fútbol para Todos. Además, bregaban por la profesionalización del torneo, pidiéndole a AFA que intervenga en la AFIP para atenuar los gastos por contratos y erogaciones de viajes.

Sin embargo, aquella primera postura, que tenía alineados a todos los clubes (a excepción de Crucero del Norte) ya no tiene la fuerza del comienzo. El presidente de Deportivo Maipú de Mendoza, Omar Sperdutti, se encargó de contarle a Día a Día qué sucedió con los demás dirigentes. “Me llama la atención que muchos dirigentes no están atendiendo los celulares. Los delegados de las zonas no me llamaron. Estoy muy molesto porque dijimos que íbamos a ser solidarios, la idea era no arrancar el campeonato pero veo que ahora todos están bien económicamente”, ironizó Sperdutti.

“A muchos se les cortó la lengua pero cuando están con nosotros opinan”, dijo en alusión a dirigentes que habrían cedido ante la negativa inicial desde la casa madre del fútbol para darles más dinero. “La idea era clarita. Si algún club no podía jugar, la postura era no arrancar pero estoy decepcionado”, disparó el mandamás del Botellero mendocino.

Otra de las voces que dialogó con Día Día fue el presidente de Racing, Antonio Ruiz. Al respecto, sostuvo: “En principio vamos a arrancar. La idea es mejorar los fondos económicos por parte de AFA. Por ahora, no se consiguió nada de lo que se pidió pero uno confía en que se van a ir cumpliendo los reclamos”, expresó esperanzado el titular académico.

Todo enardeció días atrás cuando el vicepresidente de Juventud Antoniana de Salta, Rubén González, se despachó con declaraciones hacia Julio Grondona. “¿Saben lo que dijo Grondona? “A mí no me importa un carajo si ustedes juegan o no el torneo Argentino A, yo ya eché a Diego Maradona y no tendría ningún problema en hacerlo con ustedes”.

Uno de los clubes más criticados por no adherirse a los reclamos fue Talleres. Ernesto Salum, representante del Fondo de Inversión, explicó a este diario los motivos: “Lo plantearon de manera equivocada. Tienen razón en lo que piden y a nosotros también nos hace falta la plata pero hay formas de pedir”, cerró Salum.

Chau, chau adiós. Horacio Pierdominici, de la subcomisión de fútbol de Cipoletti, renunció. “No íbamos a jugar si no había dinero. Juegan por miedo a represalias y da déficit”.