El presidente de la Fundación Azul y Blanco, Ernesto Salum le dijo a Día a Día que redoblará la apuesta. Eso sí, se crearía una nueva forma de aportes.

No hay más fútbol. La pelota se para por tres meses para Talleres. En esos 90 días, el club deberá reordenar todo. Desde la continuidad del cuerpo técnico o la búsqueda de otro; el armado del nuevo equipo y la tranquilidad económica para la administración. Entonces, más allá de la cancha, hay quienes no dejarán de jugar su propio partido. Por empezar, el juez de la quiebra de la T Saúl Silvestre y los Fiduciarios serán los encargados de mover la pelota. Mientras, la Fundación Azul y Blanco tiene a sus jugadores aún pensando en que se puede continuar trabajando, redoblando los esfuerzos, sin dar el brazo a torcer.

Por esto, Ernesto Salum le confirmó ayer a Día a Día que la idea del órgano de ayuda y colaboración con la quiebra será la misma de siempre: trabajar por Talleres. “Mañana (por hoy) habrá una reunión de todos los integrantes de la Fundación y seguramente me reuniré con los los integrantes del Fideicomiso y con el juez Silvestre”, recalcó Salum. La idea ya se está gestando y se está tratando de conformar un nuevo frente económico que dé garantías a los que manejan el club de que no se engrosará el pasivo y que se aportará desde afuera. “Nosotros estamos dispuestos a seguir colaborando y a sumar a personas muy importantes de Córdoba, de Talleres, pero así no podemos seguir. Acá es algo concreto: necesitamos dinero y hay quienes lo pueden aportar. Y, por otro lado, no pienso ni yo ni nadie de Talleres acostumbrarnos a jugar este torneo. Nosotros vamos a trabajar para sacar definitivamente a Talleres del Argentino A”, destacó.

La continuidad de Tito. “Con el entrenador no hemos hablado. Estamos todos muy abatidos. Tengo, personalmente, la idea de que Rebottaro continúe en el club. Dio muestras de que es una persona íntegra y trabajadora. Vamos a ver qué quiere hacer, pero vamos a hablar tranquilos en las próximas horas”, expresó Salum respecto de si el DT Andrés Rebottaro puede llegar a prolongar su estadía en barrio Jardín. Un hombre clave en la vida de la T será Víctor Binello, flamante asesor deportivo del Órgano Fiduciario, quien están en consonancia con la Fundación y ya empezando a trabajar de cara al próximo Talleres.

¿Y el plantel? La idea de Salum es la de mantener la misma base. Quienes están cerca de alejarse son Federico Arce, Emiliano Ciucci y Alexis Cabrera. A ellos se les podrían sumar un par de nombres más y no se sabe qué sucederá con Julio Buffarini y con Juan Galarraga que quedarían libres. Mientras, se pretende retener a jugadores como Damián Solferino (prioridad), Matías Giordano, Mateo Martinelli, Miguel Monay y entraría Maximiliano Blanco. Son una fija que seguirán Lisandro Sacripanti y Adrián Aranda, al igual que Ramiro Pereyra, Agustín Díaz, Sebastián Navarro, Ricardo Marín y Juan Aballay. Al menos es un bosquejo inicial, pero todo va a depender de lo que vaya viendo el futuro entrenador o el propio Rebottaro si es que continúa.

Hoy comenzarán a definirse cuestiones más finas en torno al futuro de Talleres. El factor económico será uno de los temas preponderantes. La Fundación y los socios amigos de la T comenzarán a delinear cómo seguirán apoyando a la institución.

El plantel vuelve al trabajo y esperan el final. Ayer, cerca de las 16, la delegación albiazul regresó desde Tres Arroyos en colectivo, luego de la eliminación del campeonato. Cansados y apesadumbrados, el equipo tuvo tarde de descanso . El cuerpo técnico citó a los jugadores a las 16.30 en barrio Jardín para que hoy comiencen a trabajar, en forma liviana, de cara al final del campeonato el miércoles próximo cuando la T reciba a Desamparados de San Juan. Ambos equipos no tienen nada por qué jugar en el campeonato. Se define, además, si el Fideicomiso pone entradas a precios bien populares, como muestra de agradecimiento a los hinchas albiazules. Además, es probable que se organice algo en torno al eventual retiro oficial de la actividad de Federico Lussenhoff.