El ministro de Gobierno, Carlos Caserio, aguarda una denuncia penal de Talleres para intervenir por la golpiza que recibieron en Santiago.

La gravedad de las agresiones y daños que sufrieron los hinchas de Talleres por parte de la Policía de Santiago del Estero el pasado domingo, antes, durante y después del partido con Central Córdoba por el Torneo Argentino A no pasó inadvertida ayer para el Gobierno provincial.

En diálogo con Mundo D, el ministro de Gobierno, Carlos Caserio, aseguró que está aguardando que Talleres “haga la denuncia correspondiente para que podamos enviarle un escrito al gobierno santiagueño y pedirle que investigue”. “Extraoficialmente tenemos información de que la actuación policial fue un tanto excedida, pero sin ese requisito no podemos hacer nada”, añadió.

La denuncia que Caserio solicita sería realizada en las próximas horas por el fideicomiso albiazul, que ayer, en la sede social del club, dedicó buena parte del día a receptar los casos de agresiones que relataron los hinchas.

Al menos así se desprende de las declaraciones del dirigente de la Fundación Azul y Blanco, Ernesto Salum, ya que ayer Daniel Ruffener, el fiduciario encargado de tomar las denuncias de los hinchas, se mantuvo en silencio. Su par Gustavo Eluani respondió el llamado de Mundo D, pero aclaró que sobre el tema sólo hablaría Ruffener.

Quien no puso objeciones para hablar fue el titular del Cosedepro (Consejo de Seguridad Deportiva de la Provincia), José Rufeil, quien expresó: “No tenemos jurisdicción sobre Santiago del Estero, por lo que la seguridad de los hinchas de Talleres correspondía a la Policía de esa provincia. No obstante, le he pedido una reunión al ministro Caserio”.

Rufeil aseguró también que está preparando una carta que dirigirá hoy a Pablo Paladino, subsecretario de Seguridad Deportiva de la Nación, que depende del Ministerio de Justicia de la Nación, en la que insistirá “en la creación de un Consejo Federal de Seguridad Deportiva, un organismo nacional en el que puedan resolverse problemas como éstos”.

El funcionario adelantó que hoy se reunirá con el órgano fiduciario albiazul y la Fundación “para recibir sus informes y elevar al Consejo Federal de la AFA una queja. Más allá de mi cargo, creo que seria conveniente hacer una denuncia en la Justicia provincial de Santiago del Estero y recurrir a un fiscal federal”.

En otro orden, el secretario del Consejo Federal de la AFA, Alfredo Derito, aseguró ayer que en el informe del árbitro David Bresler “no figuran referencias a incidentes adentro del estadio, ni entre las hinchadas ni con la Policía. Si los hubo, habrán sido afuera. Según el árbitro, el partido se desarrolló y terminó normalmente”.

Finalmente, el titular de la Liga Cordobesa de Fútbol, Emeterio Farías, sostuvo que la entidad “no puede realizar ninguna denuncia ante el Consejo si no la solicita Talleres, que hasta ahora no lo hizo”.

“No hubo connivencia”. En diálogo con Mundo D, el comisario mayor Marcelo Camaño, jefe del Departamento Operaciones de la Policía santiagueña, desmintió que haya existido connivencia entre los uniformados y la directiva de Central Córdoba, aunque admitió que hubo un “exceso de celo” hacia el público cordobés.

“No negamos que hubo un exceso de celo, pero sólo para evitar desmanes mayores. Hubo algunos lesionados en la tribuna, pero porque tuvimos que responder al accionar de los hinchas de Talleres, que querían romper el alambrado olímpico”, aseguró Camaño.

“Para nosotros el operativo fue un éxito, porque no hubo cruces ni violencia entre hinchadas. Y no nos prestamos a ‘acuerdos’ con dirigentes. Ni con los de Central Córdoba ni con los de ningún otra institución de Santiago”, concluyó.

Ayer, el bloque oficialista de la Legislatura provincial repudió la agresión que sufrieron en Santiago los hinchas de la “T”.

Pura resignación. La partida de Talleres del estadio de Central Córdoba fue rauda. Tan audazmente partieron los jugadores albiazules que ni siquiera utilizaron las instalaciones para bañarse. Prefirieron regresar al hotel Libertador para darse una ducha antes del viaje de regreso.

Tampoco quisieron referirse al encuentro con los santiagueños. Pero sí habló Andrés Rebottaro, quien con su habitual cigarrillo entre los dedos, descargó su bronca al ser consultado por la derrota: “Acá hay que hacer otro análisis en lugar de hablar de los errores que pudo haber cometido Talleres. La verdad... felicito a los dirigentes de Central Córdoba”, dijo “Tito” con una sonrisa irónica.

“Ellos tenían que ganar porque si no se quedaban afuera de la clasificación –continuó el DT–. Algo había que hacer. Había que bajar al puntero de cualquier forma. Esto en Córdoba no hubiese pasado, pero bueno... Así es el Argentino A”, dijo lamentándose.

Sus declaraciones eran en clara referencia a los dos penales que el árbitro David Bresler había sancionado en contra de Talleres. “Hay que ver esos dos penales. Desde el comienzo del partido, que no nos cobraron las tres primeras faltas, ya nos dimos cuenta de cómo iba a ser el partido”, siguió Rebottaro.

En cuanto a lo estrictamente futbolístico, el técnico albiazul se fue algo conforme. “Más allá de todo, hoy (por ayer) buscamos, buscamos y buscamos, pero no se dio. No pudimos quebrar a Central Córdoba”, subrayó.

Por último, en tono autocrítico, el DT dijo que Talleres deberá mejorar de cara al futuro. “Seguro que cometimos errores y que tenemos que corregir cosas, como por ejemplo tener más tranquilidad a la hora de definir. No lo niego, pero no hay que dejar de ver lo otro a la hora de analizar por que perdimos”, cerró.