El ambiente de la Boutique cada vez es más peligroso. Ayer hubo peleas entre barras y agresión a los familiares de los jugadores.

Ayer se vivió el clima más hostil en barrio Jardín desde que Talleres recuperó su localía en la Boutique. La intolerancia avanza a paso firme, al punto que los que encargados de planificar el operativo de seguridad manejan la posibilidad de que Talleres oficie de local en otro escenario, no ante Defensa y Justicia, sino en el clásico ante Belgrano (ver aparte).

Ayer, a los 40 minutos del primer tiempo, el encuentro estuvo detenido cinco minutos, ya que varios hinchas de la barra brava de “La Fiel” traspasaron la puerta que conecta la cabecera Norte con la platea baja, y se trenzaron a puños con otros simpatizantes ubicados en la platea descubierta. Eso motivó la intervención policial, que detuvo a varios hinchas. La excusa de los violentos fue que “no les gusta que puteen a los jugadores”, como dijo un integrante de la facción. Un escándalo.

Y al término del partido, se vivió lo más desagradable: desde la platea descubierta Norte, comenzaron a insultar a los familiares de los futbolistas, incluso a algunos los agredieron con botellas de agua mineral. Lo peor fue cuando uno de los proyectiles cayó en el cochecito del hijo del jugador Guillermo Báez, provocando la ira del futbolista, quien intentó golpear a los agresores. Otros jugadores que tuvieron que intervenir para proteger a sus familiares fueron Cristian Zermatten y Luis Salmerón, el más exaltado de todos. Y la Policía lo detuvo en la puerta de acceso a la platea.

En las zonas aledañas, sólo hubo insultos y alguna que otra corrida. El saldo final dejó a 35 detenidos. El comisario mayor Hugo Ceballos, a cargo del operativo de seguridad, descartó la posibilidad de que Talleres cambie de cancha, aunque es una opción que está siendo estudiada. “Me parece que con el manejo de este dispositivo, evitamos que haya inconvenientes mayores. No creo que el escenario corra peligro, mientras sigamos trabajando con precaución”.

Zermatten fue uno de los que más sintió los incidentes. “Siento mucha pena y dolor. Que se la agarren conmigo, que me insulten, me lo banco, pero que se metan con mi familia es algo que no voy a tolerar. Hay límites para todo”, dijo el volante. Y Báez aportó: “No voy a permitir que ningún familiar mío corra riesgo, se perdió la cordura. Mira si ese proyectil le pegaba en la cabeza a mi hijo y a mi señora, como casi pasó. No sé qué hubiera hecho”.

Con Belgrano, ¿dónde? Los episodios de violencia hicieron crecer la intriga sobre el escenario a utilizar por Talleres, para oficiar de local en las próximas fechas. La Boutique albergará al duelo ante Defensa y Justicia, el 11 de abril (28ª jornada), pero en el siguiente compromiso de local, será el clásico ante Belgrano (30ª fecha), el 25 de abril venidero. Teniendo en cuenta los últimos antecedentes, sumados a la situación comprometida con los promedios, el Cosedepro y la Policía analizan la posibilidad de cambiar el reducto de juego, por razones de seguridad.

Caída la posibilidad de utilizar al Estadio Córdoba (se usará en esa fecha para el Rally Mundial), barrio Jardín se encuentra lejos de ser la cancha ideal para jugarse, por más que Ateliers insistirá para ser local en su casa. Los estadios alternativos son los de Instituto y Racing, en ese orden, aunque no se descarta la posibilidad de jugarse en el interior provincial. La posibilidad más concretar es aplazar el cotejo para el 28 de abril y disputarlo en el Chateau Carreras.