En la práctica de ayer, el DT interino mantuvo una charla larga y tendida con los referentes del plantel. El lunes, a las 21, el Albiazul visitará a Almagro. La práctica de fútbol está prevista para mañana.

Se siente fuerte, confiado. Su condición de entrenador interino no le quita autoridad en lo más mínimo. Raúl Peralta, el DT bombero que tomó el mando de Talleres tras la renuncia de Juan Amador Sánchez, tiene el apoyo del peso más pesado; la banca de Carlos Ahumada.

El gerenciador mantiene un diálogo permanente con Peralta. Sabe que el partido del lunes a las 21 ante Almagro será decisivo y quiere que su DT esté con el mejor ánimo. “Lo llama todos los días para arengarlo y para motivarlo. ‘Vos tenés la capacidad para sacarnos de esta situación’, le dice Ahumada”, aseguran desde el círculo íntimo de Ateliers. Y, a esta altura, no es tan descabellado pensar que el técnico de las divisiones menores pueda quedar como el DT oficial, si la T gana en José Ingenieros. Por lo pronto, ayer por la tarde en la Boutique (por la mañana, Talleres trabajó en el predio de las 24 hectáreas), Peralta dio un paso fundamental en su intención de que “nadie le arme el equipo”. Mantuvo una prolongada charla con los referentes (Lussenhoff, Salmerón, Cobelli, Stang, Serrizuela, Zermattén, entre otros), quienes dijeron “bancarlo” en su mayoría.

Luego, el DT ordenó trabajos físicos y de definición. El ensayo de fútbol se realizará mañana, a las 17, en barrio Jardín. ¿Una buena? Emanuel Céliz no tiene distensión una de ligamentos de rodilla, sino sólo un hematoma y podría llegar a ser de la partida ante el Tricolor.