Había mucha expectativa en el público de Talleres para ver a su equipo. Pero de todas maneras, la Boutique no presentó el marco esperado y las tribunas no estuvieron repletas. Cerca de nueve mil hinchas se congregaron para darle calor y aliento a su equipo.

En el inicio, como era de esperar, todas las miradas y los aplausos fueron destinados al entrenador de Vélez, Ricardo Gareca, quien dejó un recuerdo imborrable en todos los simpatizantes de la “T”. No obstante, el mayor pico de euforia fue cuando el equipo de Talleres salió a la cancha y ante la falta de papeles y pirotecnia, hubo una bandera gigante desplegada en la popular lateral que junto a los cánticos pudo suplir esa ausencia.

El destacado tenor de la Fiesta de las Colectividades de Alta Gracia, Andrés Pico, entonó el Himno Nacional; y a continuación, nuevamente Gareca se robó el protagonismo. Cuando la tribuna lo visualizó, comenzó el tradicional cántico “¡¡¡Olé, olé... Tigre, Tigre!!!”. Luego, el ex DT albiazul se levantó del banco de suplentes y agradeció con los brazos en alto, la muestra de cariño.

En el entretiempo, bailaron grupos musicales con la vestimenta tradicional de México y luego el cuartetero “Negro” Videla, confeso hincha de la “T”, entonó una canción dedicada a Talleres y otra a Daniel “Rana” Valencia.