En un partidazo Talleres y Tiro Federal empataron 3 a 3 con alternativas cambiantes y con justicia en la chapa final. Cobelli, Salmerón de penal y Stang los goles del elenco de “Humbertito” que dejó pasar la chance de ser puntero.

Hubo de todo. Para todos los gustos. Desde la impensada supremacía de Tiro Federal en el juego y en la red de los primeros 45’, hasta el generoso esfuerzo de Talleres para acorralar al rival, ponerse arriba y generar el estruendoso aplauso de su gente de principio a fin en el complemento. En el medio, quedó un partido atrapante, fascinante, discutido en términos de juego por dos equipos que pusieron todo lo que tenían por una victoria que les sonrió, les coqueteó y que de tanto hacerlo en noventa minutos espectaculares, terminó sin ser de nadie aunque repartiendo el honor por la ambición que ambos tuvieron para llevársela.

Lo ocurrido en la primera mitad fue todo mérito de Tiro Federal y del “Chaucha” Bianco, su técnico, claro está. Por la inteligencia con la que planteó el partido, descifrando la intención de Talleres de jugarlo a partir del manejo de las acciones en la mitad de la cancha, allí donde Humberto Grondona pensó un partido haciendo abstracción de las bondades de Tiro para jugar, administrar la pelota y hacerla circular siempre por abajo y hacia adelante. Por eso el parcial fue del elenco rosarino en la consistencia del juego, en la disposición táctica, en situaciones de gol y obviamente en las dos veces que lo obligó a Talleres a sacar del medio.

¿Qué sucedió? Algo así. Talleres puso a Basualdo para controlar los movimientos de Bezombe en el armado de Tiro y junto a él, Esquivel, Zermatten y Quiroga para completar un cuarteto perfilado más para pensar en Silbonei que en el resguardo de Brasca. Y Bianco diseñó un equipo capacitado para defenderse jugando, con Casado cerquita de Bezombe para tocar, moverse siempre y generar un desconcierto absoluto del equipo albiazul a la hora de laburar para recuperar la pelota. ¿Consecuencia? Basualdo quedó solito en el medio, Zermatten no la agarró y no marcó a nadie, Esquivel quiso cerrar para colaborar en el medio y por su andarivel Del Aguila construyó un callejón que llenó de problemas a Gastón Stang. Con Talleres quebrado al medio, Tiro se hizo fuerte en ese sector con Martina y Menicocci y como manda el manual le entró por abajo, con toques cortos, punzantes vía Casado-Bezombe convirtiendo al fondo albiazul en un tembladeral, sin que nadie supiera cómo marcar, de qué forma achicar las libertades de un adversario que por momentos fue un aluvión.

Tiro comenzó ganando en el amanecer del partido con un golazo de Javier Rossi con resbalón de Báez incluído y aumentó en el ocaso del parcial con otra definición exquisita del propio Rossi a la salida de una jugada geométrica de Tiro en ataque. Hasta ahí estaba bien. El equipo de Bianco había sido más y mereció irse al descanso con el premio del 2 a 0 arriba.

En el complemento fue otra la historia. Apareció en el partido la otra mitad de Talleres. Esa que si está pensada y debidamente aceitada para lastimar arriba con un andamiaje ofensivo a todas luces espectacular y que corrobora además una actitud generosa ante la necesidad de disimular flaquezas e ir en búsqueda del partido. Talleres es dos equipos en uno. Vulnerable hasta la desesperación cuando lo atacan y temible cuando apunta toda su artillería sobre el arco de enfrente. Cuando lo atacaron perdía 2 a 0 y cuando entendió que el negocio estaba en las narices de Silbonei puso el partido al borde del infarto de su gente. La propiedad del partido fue cambiando de dueño y para ello, debieron coincidir un par de secuencias puntuales.

A los 4´ Cobelli achicó desviando de cabeza un tiro libre perfecto de Zermatten y a los 14´ se fue expulsado Pérez en Tiro por doble amonestación. En ese escenario, Talleres fue una tromba sobre el área rosarina con el fútbol de Wilchez, la pegada de Zermatten, el empuje de Lu-ssenhoff y las ganas que pusieron Cobelli y Salmerón para dar vuelta el destino. El Pupi empató de penal sobre los 30´ por una mano del “Tatita” Brown, Stang sacó la escopeta para el tercero a los 45´ y Eduardo Vilce que había ingresado para compensar a Tiro en el medio sacó un misil que le perforó el arco a Brasca para el 3 a 3 definitivo.

Partidazo. Empate y aplauso. Los dos hicieron méritos para llevarse todo y no merecían quedarse sin nada. Talleres sufre y mata por igual pero no se guarda nada. Por eso, aunque la punta no pudo ser, su gente le regaló una ovación en el final.

TALLERES 3 / TIRO FEDERAL 3

Talleres. Brasca; Gastón Stang, Lussenhoff,Báez;Esquivel,Cristian Basualdo,Cristian Zermatten,Matías Quiroga;Wilchez;Salmerón y Cobelli. DT: Humberto Grondona.
Tiro Federal. Silvoney; Claudio Pérez,Juan Brown,Diego Ledesma;Daniel Chávez,Menicocci,Gastón Martina,Deláguila;Juan Casado, Bezombe yJavier Rossi.DT: José María Bianco.

DATOS DE PARTIDO

Goles: PT 4m. y 37m. Rossi (TF). ST 4m. Cobelli (T); 29m. Salmerón, de penal (T); 46m. Stang (T) y 47m. Vilce (TF).
Cambios: ST 10m. Buffarini por Báez (T); 16m. Rodríguez Paganno por Bezombe (TF); 18m. Moreira Aldana por Basualdo (T); 30m. Azcurra por Esquivel (T) y 38m. Vilce por Casado (TF).
Amonestados: En Talleres: Zermatten, Wilchez, Salmerón y Quiroga. En Tiro Federal: Brown, Menicocci y Vilce.
Expulsados: ST 14m. Pérez (TF) y 30m. Chávez (TF).
Cancha: Talleres.
Arbitro: Daniel Raffa.